Materias que habían sido consideradas clave por los integrantes de la Comisión de Principios Fundamentales se rechazaron ayer en el Pleno.
Sólo nueve de los 30 artículos propuestos habían sido aprobados en general, y ayer ese número volvió a reducirse.
Pasaron al borrador de nueva Constitución: El inciso uno del artículo 6 (Igualdad Sustantiva), los incisos uno, dos y cuatro del artículo 9 (naturaleza), el artículo 9M (Chile es un país oceánico), el artículo 11 (interculturalidad), el inciso dos del artículo 12 (lengua de señas), los incisos uno, dos y tres del artículo 14 (Probidad y Transparencia), y los incisos 1 y dos del artículo 15 (Supremacía Constitucional y Legal).
Y si bien son puntos “importantes”, los representantes lamentaron que la norma que consagraba que Chile es un “Estado social de derecho”, no obtuviera los respaldos necesarios. Tuvo 100 votos a favor, 47 en contra y cuatro abstenciones.
Por ello, los reproches se hicieron sentir, ya que podría ser la antesala de mantener un “Estado subsidiario”.
“De no creer que esa fórmula política, que abría la posibilidad de un proyecto transformador, haya sido rechazada. De los defensores del Estado subsidiario lo puedo entender. De otras fuerzas resulta incomprensible”, cuestionó Christian Viera (D17), al tiempo que María José Oyarzún (D7) expresó: “Estuvimos a sólo tres votos de conseguir un Chile que dignifique nuestras vidas.Incomprensible”.
Ambos hicieron referencia a representantes de la Coordinadora Plurinacional y Popular (ExLista del Pueblo y escaños reservados), como Alejandra Pérez, Victorino Antilef e Isabel Godoy, que votaron rechazo.
Lisette Vergara (D6) y Marco Arellano (D8) fueron otros representantes que se opusieron, y como ambos explicaron, porque no sólo apunta a un “Estado social de derechos”, sino que a un “Estado social garante de derechos”.
Asimismo, se rechazó con 89 votos a favor el articulado referente a establecer que “Chile es un Estado plurilingüe, su idioma oficial es el castellano y los idiomas de los pueblos indígenas serán oficiales en sus autonomías territoriales”, lo que también generó molestias.
“En un país monolingüe hay que hacer mucha pedagogía para que se entienda el valor de las lenguas indígenas, tan discriminadas al igual que los pueblos. Seguiremos hasta que los pueblos hablen con orgullos sus lenguas”, expresó Elisa Loncon (Mapuche).
Durante la sesión, además, se rechazó el artículo que indicaba que son “emblemas representativos de Chile la bandera, el escudo y el himno nacional”, por lo que deberá ser revisado.
Hubo puntos, eso sí, que no alcanzaron la mitad más uno del apoyo de los presentes, por lo que quedaron excluidos del debate constitucional.
Se trata del inciso seis del artículo 14, que fijaba que “corresponderá a ley regular el principio de transparencia de la función pública, los procedimientos para el ejercicio de ese derecho y su amparo”; y el inciso dos del artículo 17, que disponía: “El Estado reconoce los símbolos y emblemas plurinacionales propios de los distintos pueblos indígenas y tribales”.
Sí se aprobaron:
- La Constitución asegura a las personas la igualdad sustantiva.
- Las personas y los pueblos son interdependientes con la naturaleza.
- Chile es un país oceánico.
- El Estado es intercultural.
- El Estado reconoce la lengua de señas como lengua natural y oficial de personas sordas.
- Es deber del Estado promover la integridad de la función pública y erradicar la corrupción.
- Chile es un Estado fundado en la supremacía constitucional y el respeto irrestricto a los DD.HH.
Nueva alerta de la Corte Suprema
En la previa de la votación de hoy en el Pleno del segundo informe de la Comisión de Sistemas de Justicia, que contiene 34 artículos y nueve disposiciones transitorias, la Corte Suprema envió un nuevo oficio donde cuestionan parte de los planteamientos.
En su primer punto, reprochan que el denominado Consejo de la Justicia, entre sus atribuciones, pueda “efectuar una revisión integral de todos los tribunales del sistema nacional de justicia”, pues se pondría en riesgo la independencia judicial.
Asimismo, cuestionan la forma en que estaría compuesto dicho consejo, ya que al no estar integrado en su mayoría por jueces, podría politizarse.
En tercer punto, se pone en duda lo referente a bajar la edad de jubilación y poner un tope de 12 años al cargo de ministro de la Suprema.
Y por último, ponen en entredicho la forma en que el Consejo de la Justicia va a calificar a los jueces, dado que la redacción de la norma no sería clara.
Por lo mismo, se espera que en la sesión estos puntos sean protagonistas, al igual que las dudas que rondan sobre “justicia vecinal”.