La película argentina ‘Granizo’ sigue generando buenas impresiones en la audiencia. Y una muestra de ellos es que sigue posicionándose como la favorita de Netflix en diferentes países debido a su temática, así como la manera tan enternecedora con la que se manejan las relaciones, egos, entre otros aspectos que en ella se abordan.
De ahí que quienes han tenido la oportunidad de disfrutarla han encontrado en ella el entretenimiento ideal, pues más allá de ser una producción más, ella está repleta de mensajes, lecciones, así como reflexiones importantes para los seres humanos y sobre todo para quienes tienen la postura de lidiar entre los éxitos profesionales y el amor de la familia. Todo ello ha hecho que esta historia sea digna de ver con los seres queridos.
Por eso, y por todos los detalles que se muestran en pantalla es que esta trama ha calado muy bien entre el público que gusta de la combinación de géneros como el drama, el humor y hasta el romanticismo desde un punto de vista paternal. Esa ha sido la clave de su éxito.
¿Cómo fue grabar ‘Granizo’, la película que es un furor en Netflix?
Hasta ahora ‘Granizo’ ha recibido buenos comentarios de parte de la crítica y los más especializados en este tipo de tópicos, por eso, para demostrar de que esta producción fue elaborada con la más impecable dedicación, su director, Marcos Carnevale, reveló detalles de lo que significó sacar adelante este proyecto que lo reúne nuevamente con el actor Guillermo Francella con quien ya había trabajado anteriormente, convirtiéndose así en una combinación exitosa.
Para Carnevale el recrear una tormenta de granizo no fue nada fácil, esto requirió de varios meses y semanas tratando de armar cada una de las bolas de hielo a fin de que estas le dieran mayor credibilidad a cada una de sus escenas. Éstas eran de varios tamaños y dimensiones. Incluso, llegó a asegurar que se usaron alrededor de más de 10 mil piezas. Sin embargo, también comentó que hizo uso de la tecnología, sobre todo para los momentos trágicos y peligrosos en los que algunos bloques impactaban con las estructuras más emblemáticas de las calles principales de Buenos Aires.
Pero, más allá de eso, se enfocó también en mostrar a un personaje muy humano, real que está cegado, sin saberlo, por la fama y ha dejado atrás el verdadero sentido de la vida que está basado en el amor y en las personas que forman parte de él y que por falta de tiempo las dejan a un lado, sin saber que son ellos los que siempre estarán dispuestos a recibirlos con los brazos abiertos ante los éxitos y fracasos.
“Todas las películas que hago son sobre humanos, de relaciones. Me interesa mucho el ser humano y lo que le pasa, más que las historias que uno pueda contar. La película tiene un paraguas conceptual muy grande, que es la cultura de la cancelación. Es la historia de un tipo que conoció las mieles del éxito, se mareó y se creyó el personaje que ven los demás”, dijo el director al portal Télam, pero también hizo énfasis en que los esfuerzos bien valieron la pena, pues se logró un resultado muy genuino en esta historia que está siendo la número uno en varios países.
