Luego de que se diera a conocer lo que pasó en el masivo concierto del rapero estadounidense Travis Scott, que dejó 8 muertes y más de 300 heridos, las autoridades de Houston dieron a conocer nuevos antecedentes: varias personas sufrieron de sobredosis de opioides.
Este nuevo hecho hizo que la policía del Estado de Texas creara una hipótesis: que alguien intentó inyectar drogas a los asistentes lo que provocó la estampida que acabó con la muerte de varias personas.
¿Cómo se llego a esta teoría? porque uno de los oficiales de seguridad recibió un “pinchazo” en el cuello cuando intentaba inmovilizar a alguien durante el concierto. El oficial perdió el conocimiento por lo que tuvo que recibir un fármaco llamado Naloxona y que sirve para revertir rápidamente una sobredosis de opioides.
De igual forma, Sam Peña, el jefe de bomberos de Houston, dio otro dato interesante. El bombero explicó que el personal médico que estaba en el concierto administró “varias” dosis de Naloxona.
Sin embargo, en la rueda de prensa el jefe de Policía de Houston, Troy Finner, enfatizó que se trata solo de una teoría que está circulando por distintas redes sociales, y que se pondrán a investigar lo más pronto posible para conocer la realidad de los hechos.
Troy Finner también aclaró que la investigación tendrá carácter criminal y están implicadas las unidades de homicidios y narcóticos del departamento de Houston.
Recordemos que el evento contó con la participación de 50.000 espectadores, y entre los fallecidos habían dos menores de edad, de 14 y 16 años, dos personas de 21 años, y otras dos de 23 y una de 27, además, de otro varón que no ha sido identificado.