La policía de Austin, Texas, detuvo a un hombre de 24 años y lo acusó de homicidio por intoxicación y accidente con lesiones tras un fatal atropello.
Según Statesman, Paul Joseph García conducía un Ford Focus blanco de 2014 cuando atropelló a un peatón que iba empujando un carro de supermercado.
Fue tal el impacto, que el cuerpo del hombre -que no ha sido identificado-, atravesó el parabrisas y quedó en el asiento del copiloto.
Según los documentos de la policía, la víctima tenía “lesiones traumáticas en la cabeza” y “algunas partes del cuerpo se habían desprendido”.
Tras ello, García condujo cerca de un kilómetro con el “cadáver destrozado” en el asiento del copiloto y luego de detenerse bajó tranquilamente del vehículo.
Los testigos dijeron que había caminado descalzo y había entrado a un bar aún con sangre y vidrios en el cuerpo “de una manera que llamó la atención de los otros clientes”.
Ahí se mantuvo sin moverse y los encargados del local llamaron a la policía, la que lo arrestó en el mismo lugar sin que el sujeto pusiera resistencia.
El documento indica que “el interior del auto estaba cubierto de sangre y tejido corporal”, y que el golpe fue tan fuerte que el carro salió disparado y dobló “un poste de acero galvanizado de dos pulgadas de diámetro que soportaba unos buzones”.
García se encuentra detenido y se fijó una fianza de 110 mil dólares.