Entró a la pizzería en el suburbio oriental de Noisy-le-Grand cerca de París la noche del viernes y pidió un sándwich, pero el desconocido comenzó a impacientarse por la demora, entonces sacó un arma y disparó.
El terror se apoderó del lugar mientras uno de los camareros caía al suelo con una herida de bala en uno de sus hombros.
El caos se transformó en dolor cuando llegaron los equipos de emergencia, quienes lucharon por salvarle la vida al joven herido, pero ya era demasiado tarde.
No fueron lo suficientemente rápido
De a cuerdo con el medio local «Le Parisien» el cliente se molestó por la demora cuando sacó su arma y disparó.
Una de las testigos dijo al medio que el sujeto se indignó «porque su sándwich no estaba preparado lo suficientemente rápido».
Tras disparar el sujeto huyó del lugar y la policía abrió una investigación para aclarar lo sucedido. Hasta el sábado el pistolero aún se encontraba prófugo.
Luego que se conociera lo que había sucedido clientes del pequeño local llegaron a dejar sus respetos por el camarero fallecido. «¿Lo mataron por un sándwich?», se preguntaba uno de los presentes.
«Es triste. Es un restaurante tranquilo, sin ningún problema. Se acaba de abrir hace unos meses», dijo una mujer que también llegó al local.