Una escena impactante encontraron los policías municipales de la localidad mexicana de Oxkutzcab, cuando encontraron a un hombre muerto recostado en una hamaca junto a 13 perros, 11 ya sin vida y dos agonizando.
El sujeto fue identificado como Mauricio Escobedo Burgos, de 76 años, un exfuncionario del Ministerio Público, quien dejó una carta de despedida, donde explicaba su drástica decisión.
El lunes, Escobedo salió temprano de compras. Según testigos, el hombre de la tercera edad fue visto comprando comida para él y sus 13 mascotas, perros con lo que era inseparable.
Escobedo padecía un cáncer terminal y ya no estaba dispuesto a seguir luchando contra la brutal enfermedad.
Ese día, el hombre de la tercera edad preparó el almuerzo, comió junto con sus perros y luego uno a uno, les suministró un veneno líquido. La última porción fue para él.
Escobedo fue a su hamaca, cruzó los brazos y falleció. Rodeando a su amo, los perros fueron muriendo con él.
La carta
Cuando llegaron los funcionarios municipales, estaban sin vida 11 de los 13 perros y el par restante falleció minutos después.
Escobedo había dicho que «vivo para mis perros» y advirtió a sus amigos que «no los dejaré solos, me los llevaré conmigo». Sus cercanos creyeron que nunca haría realidad esa advertencia.
El hombre dejó una carta de despedida a su hermano menor, con quien vivía y su persona más cercana.
En la misiva aclara que su decisión no fue impuesta por nadie ni culpa a nadie, simplemente había llegado su momento.
Su última petición es que un albañil amigo de la víctima, enterrara a sus 13 mascotas en el terreno de la casa donde vivían.