Nuevamente el caso de la muerte de la modelo brasileña Nayara Vit entrega antecedentes que prácticamente echan por tierra la tesis del suicidio.
El caso, que presenta varias interrogantes, y que es llevado adelante por el fiscal Omar Mérida ha dado un giro inesperado y escalofriante.
Según revela La Tercera, la indagatoria ahora se centra en la declaración de Rocío Catalán, funcionaria de la Sección de Investigación Policial (SIP) de Carabineros quien llegó al sitio del suceso la noche del 7 de julio cuando Nayara Vit supuestamente cayó del piso 12 de un edificio en Las Condes.
En el interrogatorio, según publica el medio, la funcionaria de Carabineros reveló que había sostenido una conversación con un guardia de seguridad ciudadana de Las Condes, quien le señaló que esa noche habían recibido llamados al fono 1402 alertando de gritos en el departamento.
Dicha información no fue consignada en el parte policial que se realizó 15 horas después de la muerte de la brasileña. Incluso, lo que es peor, tampoco se consignó que un vecino reportó el sonido de lo que podría haber sido un balazo
Catalán manifestó en el interrogatorio que le comentó esta situación a sus compañeros, pero nunca hubo certeza de cuántos llamados se realizaron al fono 1402.
Asimismo la carabinero señaló que en las cámaras de seguridad vio que Vit caminaba bien al bajarse de su vehículo y no mostró signos che haber estado bajo los efectos del alcohol.
Además, aseguró que cuando llegó al departamento que compartía con su pareja Cristián Cáceres no había signos de violencia ni rastros de una pelea, pues estaba todo en orden, aunque sus compañeros sí confirmaron que minutos antes de la muerte de la joven había caído un macetero.
Ante dichas revelaciones, la Fiscalía y la PDI siguen trabajando en toma de declaraciones y pericias que puedan permitir esclarecer el caso.