Ricardo Gareca no lo pasa para nada bien en Chile. Si bien el miércoles, en la conferencia de prensa previa al duelo de esta noche ante Perú en el Monumental de Lima, dijo sentirse “cómodo” en nuestro país, también reconoció que “no voy al estadio para no exponerme, mi presencia puede irritar”.
Y no es para menos, porque bajo la gestión del argentino, la “Roja” no ha ganado un solo partido oficial. Ya van siete presentaciones por los puntos desde aquel debut frente al propio cuadro “incaico” en la Copa América de Estados Unidos, con un horroroso saldo de cinco derrotas y dos empates, y míseros dos goles.
Este negativo rendimiento ubica al “Tigre” como el entrenador con los peores números en la historia de la selección nacional. Y esto ha derivado en un penoso último lugar en la tabla de posiciones de las Clasificatorias sudamericanas, con cinco unidades en 10 fechas, una por debajo del combinado del Rímac.
Por eso, el encuentro de hoy es definitorio para ambos, ya que el que pierda, aunque todavía tendrá chances matemáticas, estará prácticamente eliminado del Mundial del 2026. En el caso del seleccionador criollo, además, implicaría su salida del cargo, más allá de que el martes haya que recibir a Venezuela, pues la Anfp le ha puesto un piso de cuatro positivos en esta doble Fecha Fifa.
Así las cosas, paradójicamente, el técnico transandino buscará un suspiro a su calvario chileno en suelo limeño, la tierra donde supo ser feliz desde el 2015 hasta el 2022. Claro, llevó a los peruanos a un torneo planetario después de 36 años de ausencia, al clasificarlos a Rusia 2018, y estuvo muy cerca de repetir en Qatar 2022, pero quedaron fuera por penales en el repechaje contra Australia.
Para resucitar en el proceso eliminatorio, el DT del “Equipo de Todos” ha recurrido a la experiencia de Arturo Vidal, quien, a sus 37 “primaveras”, intentará levantar a un grupo decaído. De marginado pasaría no solamente a ser titular, sino aparte capitán, pues regresa a un plantel que no tiene líderes naturales, como ha quedado demostrado en esta ruta premundialista.
Por el lado de la “Albirroja”, igualmente es un choque trascendental para las aspiraciones del conjunto de Jorge Fossati, que viene de vencer en casa por 1-0 a Uruguay y de ser goleado en Brasil por 4-0. El adiestrador “charrúa” es otro que sigue confiando en los veteranos, ya que asoman como estelares Luis Advíncula (34) y Gianluca Lapadula (34), entre otros.
Franz Tamayo Medina, periodista del diario El Comercio
¿Es querido Gareca en Perú? ¿Cómo crees que lo van a recibir?
Hasta antes de firmar como entrenador de Chile, Gareca contaba con el cariño de gran parte de la afición peruana. Sin embargo, al asumir el mando de la selección chilena, muchos lo vieron como una traición, considerando la histórica rivalidad entre ambos países. Aunque persisten el respeto y el agradecimiento hacia el “Tigre” por todo lo que hizo por el fútbol peruano, especialmente ahora que los resultados no han sido los mismos desde su partida, creo que su recibimiento estará dividido entre aplausos y algunos abucheos. A pesar de eso, muchos peruanos sienten nostalgia por los buenos momentos vividos con él y entienden la huella profunda que dejó. Aunque esté en el banquillo chileno, el cariño hacia Gareca sigue siendo mayor que cualquier resentimiento.
¿Cuánto cariño perdió cuando quedó fuera de Qatar 2022 en el repechaje?
Llegar al repechaje ya fue un logro importante para Perú, pero tras la derrota ante Australia, surgieron críticas hacia Gareca por su planteamiento y las decisiones sobre ciertos jugadores. En realidad, no fue una situación nueva: durante su proceso en ambas Eliminatorias, recibió críticas por momentos en los que los resultados no acompañaban, aunque su mérito fue levantar al equipo y conseguir hitos históricos. Las críticas tras el partido contra Australia fueron normales dentro de su ciclo, pero no disminuyeron el aprecio hacia él, pues sigue siendo valorado por llevar a Perú a una Copa del Mundo y acercarlo a una segunda. Su legado sigue siendo muy positivo, pese a la derrota final.
¿Quiénes consideran que fue una traición que se haya venido a Chile?
Para los hinchas más apasionados, que viven el clásico con Chile de manera intensa, su llegada a la selección chilena fue vista como una traición. Sin embargo, no es el sentimiento generalizado, especialmente porque Gareca no fue de Perú directamente a Chile; primero tuvo un paso por Vélez y evaluó otras opciones. Es cierto que generó incomodidad que llegara a un rival directo, pero se entiende que debe seguir su carrera y se le respeta por su profesionalismo. De hecho, en Perú se sigue muy de cerca su trabajo, tanto en Chile como en su paso anterior por Vélez. Su relevancia no ha disminuido con el tiempo; incluso dos años después, su impacto sigue siendo tema de conversación, lo cual refleja lo querido e importante que fue, y sigue siendo, para el país, pese a ser extranjero.