Una mujer asesinó a su marido lanzándole agua hirviendo con azúcar cuando el hombre dormía. La esposa actuó de esta manera luego que se enteró de que lo acusaban de abusar sexualmente de niños. Corinna Smith, de 59 años, ahora recibió una condena a cadena perpetua por este crimen. Al menos debe pasar 12 años tras las rejas.
Según publicó The Sun, el 14 de julio del año pasado Smith llenó un balde con agua en el jardín de su casa en Cheshire, Inglaterra. Le puso tres bolsas con azúcar. Revolvió y lo puso a hervir. Cuando su preparado quedó listo, se lo vació a Michael Baines (80), cuando dormía.
Durante el juicio, se explicó que la mezcla se debió a que así un líquido “más viscoso, más espeso y pegajoso permanecería en la piel y causaría un daño aún mayor”. Cuando llegó la policía, el marido lloraba y la piel de un brazo y una mano se le despegaba del cuerpo. El esposo murió cinco semanas después en la unidad de quemados del Hospital Whiston.
La mujer, se dijo en la audiencia, se enteró de los rumores de que su esposo cometió “durante muchos años” abusos sexuales contra niños, incluyendo a su propio hijo, quien se suicidó en 2007. Uno de los detectives del caso dijo que Smith “dejó a Michael en agonía y en vez a emergencia, perdió el tiempo yendo a una casa a nueve puertas de distancia”, puntualizó.