El gobierno alemán anunció que adoptó un histórico plan de recuperación de 130 mil millones de euros para los años 2020 y 2021, para estimular la economía, muy afectada por la pandemia.
Entre las medidas anunciadas figura la baja temporal del impuesto al valor agregado y transferencias de deudas de los municipios hacia el estado federal.
También figura un subsidio de 300 euros por niño para las familias o el aumento de la prima por la compra de un nuevo vehículo eléctrico, con lo que espera apoyar el sector. La prima por la compra de un vehículo eléctrico pasará de 3.000 a 6.000 euros.
«Tenemos un plan de recuperación económica, un plan para el futuro y, por supuesto, nos ocupamos ahora además de nuestra responsabilidad por Europa y de la dimensión internacional», dijo la primera ministra Angela Merkel.
Las cúpulas de los tres partidos -la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Merkel, la Unión Socialcristiana de Baviera (CSU) y el Partido Socialdemócrata (SPD)- acordaron los términos del plan después de dos días de reuniones y sus detalles han sido explicados por la mandataria, acompañada por el ministro de Finanzas, el socialdemócrata Olaf Scholz.
El acuerdo prevé una reducción del Impuesto del Valor Añadido (IVA), el apoyo federal a las comunidades locales, afectadas por la crisis de la pandemia del coronavirus, así como la introducción de un bono o ayuda por hijo de 300 euros.
El plan anunciado tomará 60 mil de los 156 mil millones de euros de un paquete aprobado el pasado marzo, al inicio de la pandemia y su alcance es mayor de lo avanzado en los últimos días, cuando se valoraba un volumen de un máximo de 100 mil millones de euros.
La bajada del IVA – del 19 al 16 % en el tipo normal y del 7 al 5 % en el tipo reducido- estará en vigor a partir del próximo 1 de julio y hasta el 31 de diciembre.
El gobierno quiso dar un nuevo apoyo a las empresas, pues Alemania ha visto subir la tasa de desempleo en mayo al 6.3% y las empresas se vieron obligadas a solicitar el desempleo parcial para más de 11 millones de trabajadores desde marzo.
El paquete incluye también varias medidas de alivio fiscal para las empresas, como la ampliación de los traslados de pérdidas fiscales y la depreciación regresiva de las inversiones, que supondrá unos 8 mil millones de euros.
Para asegurar la supervivencia de las pequeñas y medianas empresas, se ponen a disposición hasta 25 mil millones de euros de junio a agosto para compensar las pérdidas de ventas relacionadas con el virus. A esto, se suman los 1.900 millones de euros para ayudar a las organizaciones culturales y sin ánimo de lucro a sobrevivir a los cierres de teatros, cines, óperas y otras instituciones relacionados con el virus.
A nivel local, los municipios que se encuentren en dificultades financieras podrán contar a partir de ahora con mayores partidas presupuestarias de las arcas federales, un proyecto defendido desde hace tiempo por el socialdemócrata ministro de Finanzas, que ha destacado que se trata de una medida «duradera» y «estructural», sin límite de tiempo.
Para el ministro de Finanzas, la bajada del IVA implicará una pérdida de 20 mil millones de euros en recaudación fiscal, aunque el Gobierno confía en que sirva para alentar el consumo.
Este video te lo explica todo: