Las políticas públicas se basan en estudios y cifras que respalden la necesidad de dar prioridad a sus acciones. De hecho, las cifras de la Encuesta Nacional de Salud (ENS) del 2010 aún, tras 7 años desde su publicación, siguen siendo las más citadas en políticas de esta materia. Por ejemplo, las cifras sobre obesidad en la población recopiladas en dicha encuesta fueron usadas en el trabajo de la «Ley de etiquetado».
Esto se debe a que la ENS es la medición más completa de salud que se realiza en nuestro país. Una nueva versión de esta radiografía a nuestro país verá la luz este año.
Según publicó el Ministerio de Salud, la etapa de recopilación de datos culminaría en enero de este año. La encuesta fue lanzada el 3 de agosto de 2016. Sin embargo, como aún no se publica consultamos a la autoridad y nos confirmaron que aún «se encuentra en proceso».
La recomendación de la Organización Mundial de la Salud, es realizar este tipo de estudios con la mayor frecuencia que se pueda
En entrevista a Publimetro, el ex Ministro de Salud, Jaime Máñalich, señaló que «el peor escenario» es construir políticas públicas sin un sustento de cifras de calidad. Cuando se realizó la ENS 2010 mientras estaba en el cargo, se planteó realizar el estudio con una frecuencia de 5 años, es decir 2015. La recomendación de la Organización Mundial de la Salud, es realizar este tipo de estudios con la mayor frecuencia que se pueda. Hay que tomar en cuenta su alto costo.
La utilidad de la ENS en los distintos servicios de salud
Felipe Leyton, Jefe del área de prevención del consumo abusivo de alcohol de Senda, señaló a Publimetro hace unos días que para realizar las distintas campañas de prevención, se basan «en varias fuentes, como estudios propios y la Encuesta Nacional de Salud del 2010». Al ser consultado sobre la necesidad de actualizar esta encuesta, también confirmó que «está en proceso». «Para nosotros es importante esta herramienta, ya que nos hemos apoyado en estudios propios, pero que son a menor escala por tema de presupuesto», agregó.
Los datos de la ENS no solo sirven para el trabajo ministerial, si no que también para el trabajo de los servicios privados.
La doctora Carolina Herrera, especialista broncopulmonar de la Clínica Avansalud, señaló que los datos de la encuesta «permiten tener una evaluación de las enfermedades no transmisibles. Como diabetes, tabaquismo y otros».
«Esto permite a las autoridades tomar desiciones económicas para hacer mejor medicina. A nosotros desde la salud clínica nos permite programar acciones médicas» agregó la especialista.
Para la doctora Herrera, lo importante, más allá del retraso, es que «ojalá el estudio se complete, ya que es una herramienta vital. Y es importante que se siga realizando con cierta periodicidad, para hacer seguimiento a las políticas que la autoridad ha ido implementando«.
Construcción de políticas públicas
Tener una nueva Encuesta Nacional de Salud permitirá evaluar como las políticas públicas que entraron en funcionamiento después del 2010 han tenido efecto. Una de ellas, la modificación a la «Ley de tabaco» del 2013, tema en el que se invierte un alto presupuesto para cuidar la salud y disminuir la adicción. Pero, ¿sabemos cuánto ha bajado el consumo nacional desde esa modificación?
Para Antonio Correa, director de Idea País «obviamente es mejor tener la encuesta del 2010 que no tener nada, pero no es el ideal». Según el director del Centro de Impacto Público, «hay un cambio demográfico importante en nuestro país que produce un cambio en el perfíl epidemiológico y, por lo tanto, es importante ir actualizando estos datos con regularidad, para ir adaptando el sistema a esos cambios».
El retraso y sus efectos
Correa señala además que «el no poder diseñar políticas públicas con la certeza necesaria podría producir errores que finalmente generarían una política pública distinta a la que queríamos en un principio«.
«En algunos casos podría llegar a ser como romper el suelo de la casa para encontrar las cañerías que se quieren cambiar sin mirar los planos: puede que le achuntemos, pero es muy probable que en el camino perdamos harto tiempo y recursos, y en esta caso la salud de las personas está en juego», enfatizó el abogado UC.
«No poder diseñar políticas públicas con la certeza necesaria podría producir errores», Antonio Correa, director de IdeaPaís
El Jefe del Departamento de Salud Pública de la Universidad de los Andes, y ex Ministro de Salud, Jaime Mañalich, tiene una visión similar. En entrevista a Publimetro señaló que «el peor de los escenarios es estar navegando y creando políticas públicas en la ignorancia. Sin saber lo que está pasando en realidad o si está funcionando lo que hacemos”.
Cabe destacar que la Encuesta Nacional de Salud, es pieza clave para el trabajo ministerial. Ya que a través de sus cifras se sustentan desiciones sobre recursos económicos, humanos y mejora de estructura del sistema de salud pública a nivel país.
¿Prioridad, presupuesto o logística?
Sobre el retraso de la ENS, el ex Ministro de salud, señaló que puede haber varios factores, entre los que destacó la falta de voluntarios, problemas de coordinación, presupuesto y también el tipo de estudio.
«Los datos que recogerá esta encuesta son muy valiosos» señaló, esto porque la nueva encuesta considera más factores que la anterior. Ante la posibilidad de que se deba terminar en un próximo Gobierno, según el ex Ministro «habría que evaluar darle un mayor aporte económico para que se complete lo antes posible».
Para el director de Idea País, lo señalado por Mañalich son factores clave, pero suma uno más. «El problema efectivamente es que faltan voluntarios y dineros para realizar la encuesta. Claramente es un tema de prioridades». Recordemos que la etapa de recopilación de datos debería haber concluido en enero de este año, y aún no hay una fecha confirmada para que esto finalmente ocurra.
«Los datos que recogerá esta encuesta son muy valiosos (…) necesitamos medir si las políticas que hemos trabajado están dando resultado», Jaime Mañalich, ex Ministro de Salud
Fuentes de distintos servicios de salud señalaron que se espera que el proceso se complete antes de terminar el año y la respuesta oficial del Ministerio es que «está en proceso», por lo que se podría inferir que el estudio sigue avanzando. La Encuesta Nacional de Salud 2016-2017 contará con más datos que su versión anterior, convirtiéndose en una herramienta esencial para seguir avanzando en la calidad de la salud pública del país.