A un día de que Donald Trump asuma como el 45º presidente de los Estados Unidos, en Washington se preparan los últimos detalles para el cambio de mando que deja atrás la gestión de Barack Obama dando paso al nuevo mandatario. La ceremonia se realizará el 20 de enero a las 12:00 horas local (14:00 horas chilenas), tal como se ha hecho desde 1937.
La ceremonia se efectuará en el Capitolio estadounidense y el comienzo estará a cargo de la banda del Ejército de los Estados Unidos, quienes dirigirán el himno nacional de ese país, el cual será cantado por Jackie Ivanko, una joven de 16 años.
A la cita también acudirá la banda del Talladega College, una tradicional universidad de mayoría negra, también se presentarán la compañía de baile Las Rockettes, las bailarinas del Radio City Hall de Nueva York y el coro mormón Tabernacle Choir.
Como suele ocurrir en cada cambio de mando, acudirán algunos ex mandatarios, para esta ocasión confirmaron Bill Clinton y su esposa, Hillary, ex contrincante de Trump; George W. Bush y Jimmy Carter, la gran ausencia será George Bush padre, quien se encuentra con problemas de salud.
Para la seguridad de la ceremonia se desplegarán miembros de la Guardia nacional y más de 13.000 soldados, cuyo costo ascendería a US$100 millones de dólares.
La suma del evento y su respectivo festejo podría alcanzar más de US$ 90 millones de dólares, monto que triplica a la investidura de Obama, que tuvo un costo de US$ 30 millones.
En EEUU el ejecutivo no corre con los gastos sino son los aliados quienes cubren esta deuda, razón por la cual diversas entidades han ofrecido su apoyo, este es el caso del grupo pro-Trump, llamado Great America Alliance (Gran Alianza de América), cuya misión es recaudar US$ 10 millones para la ceremonia.
A su vez el comité Conjunto Nacional Republicano, llamado Make America Great Again (Hacer a América Grande Otra Vez), está vendiendo artículos que hacen alusión a Trump para conseguir fondos.