Universidad de Chile tenía una oportunidad de oro para avanzar a la final de la Copa Chile. Los azules habían empatado a un tanto ante Palestino en la semifinal de ida disputada en el Nacional y tenían que ir a La Cisterna para seguir con el sueño de sumar un nuevo título y, además, asegurar un cupo a la Copa Libertadores 2019. Sin embargo, la U no pudo con Palestino y cayó por 2 a 0 para despedirse del torneo y sumar un nuevo traspié en un difícil 2018.
Un fracaso en los objetivos que le habían impuesto al entrenador Frank Kudelka, quien, pese a la eliminación y la irregularidad que muestra el equipo en el Campeonato Nacional, no tendría su puesto en peligro, pero él mismo se impuso condiciones y se jugará la vida en el Campeonato Nacional.
«No es un cachetazo fuerte, esto es más que un cachetazo fuerte. No tenemos que perder. No podemos hacer este partido, te puede ir bien o mal, pero no puede ser que nos caigamos por un gol. Ahora tenemos que brindarnos a los partidos que quedan y hacerlo en relación a la jerarquía, la historia y la tradición. La historia de la institución está por sobre todos y si no estamos a la altura de la circunstancia, la historia dará su veredicto«, indicó Kudelka.
«Estoy con mucha tristeza. Más allá de lo que nos toque, hemos tenido un año fluctuante, disparejo, de muchos vaivenes. Esto era un aliciente, principalmente para el simpatizante, y me pone triste. No estuvimos a la altura«, agregó un derrotado entrenador.
Sobre el duelo y el juego del equipo, Kudelka fue categórico al indicar que es «la misma imagen del año, muy disparejos, no hay una continuidad de resultados positivos. Hasta el gol del córner de ellos, el equipo estaba bien, mejor que el rival, teníamos posesión del balón, el dominio de terreno, acrecentábamos las situaciones de definición. Los goles son errores garrafales y de atención, no podemos hacer nada contra eso. Se hizo difícil».
«Me siento partícipe de este momento, estoy muy dolido. Puedes perder o ganar, pero hay formas y formas. En un partido de fútbol no puedes tener desatenciones y hoy la tuvimos. Nada te quita la esperanza y las convicciones, pero algo como esto te hace ir hasta lo más profundo para tomar las mejores decisiones para esta institución. No podemos seguir perdiendo oportunidades, no podemos. Me siento dolido, muy dolido. Era una gran oportunidad en un año donde las cosas no han salido bien, era una gran y linda oportunidad», concluyó.
