La gira europea de Chile está llegando a su final y este viernes tendrán el último amistoso, cuando, a contar de las 14:45 horas, enfrenten a Polonia en Poznan. El partido servirá para que los polacos se despidan de su público antes de emprender rumbo a Rusia para enfrentar el Mundial, mientras que para Reinaldo Rueda será otro encuentro donde probará jugadores jóvenes.
Por eso, el propio técnico reconoce que son el «sparring» de los polacos y que el partido ante la mundialista selección será una gran prueba de fuego para la selección que viajó hasta el Viejo Continente.
«Estamos viviendo momentos diferentes, nosotros un momento de nostalgia, y los polacos el de volver al campeonato del mundo con una selección de buen nivel. Será toda una fiesta y esperamos brindar la calidad del fútbol chileno, el talento de los jugadores y saber que puede resultar un partido interesante para las dos selecciones», dijo el técnico de la selección chilena en la conferencia de rueda previa al encuentro.
«Es el antecedente para este juego, un partido de preparación para la selección polaca, esperamos servir de sparrings y nosotros evaluar algunos jugadores, dar oportunidad a jóvenes que no eran titulares en la selección nacional. La ganancia es bilateral», agregó.
Además, sobre la presencia de Arturo Vidal, quien interrumpió sus vacaciones para trabajar con los fisioterapeutas de la selección y también para acompañar a los jóvenes seleccionados, Rueda concluyó que «para estos jóvenes es muy gratificante. Ha continuado su proceso de rehabilitación y lo que ha compartido con los seleccionados ha sido muy positivo. Llegar a Polonia con Arturo fue muy significativo».