En la previa del clásico carioca entre Flamengo y Fluminense en la Copa de Río de Janeiro, Paolo Guerrero es quien capta toda la atención de hinchas y periodistas. Es que, luego de su suspensión por dopaje, el delantero peruano volvió a los entrenamientos gracias a un permiso de la FIFA, organismo que también le redujo el castigo de un año a seis meses, lo que le permitirá decir presente en el Mundial de Rusia cuando defienda a la selección de su país.
Con la camiseta del Fla, Guerrero aguarda retornar lo más pronto posible a las canchas y para eso comenzó este lunes su puesta a punto, donde realizará una ardua pretemporada y trabajo físico, ya que el 6 de mayo, tres días después que termine su sanción, podría estar nuevamente jugando.
Con estas fechas, el atacante peruano podría retornar a las canchas contra Internacional de Porto Alegre (6 de mayo), o bien aguardar hasta los duelos de Copa Libertadores frente a Emelec (16 de mayo) y River Plate (23 de mayo).
Sin embargo, pese a que ya alista su retorno a las canchas, la teleserie de Paolo Guerrero aún está en la batalla judicial. Según Globo Esporte, la defensa del artillero busca absolver el caso y «la expectativa es que sea juzgado en abril y si el peruano tiene éxito, podrá jugar inmediatamente, abreviando unas semanas su regreso a las canchas», asegura el medio brasileño.
Guerrero, que venía entrenando forma independiente en Argentina, vuelve este martes a los entrenamientos de alta competencia con Flamengo y con la mirada puesta en el Mundial de Rusia 2018, donde Perú comparte grupo con Francia, Dinamarca y Australia.