El Gráfico Chile
Claudio Ranieri vive un momento de ensueño en Leicester City. Luego de constantes fracasos y pocos objetivos cumplidos en grandes intituciones de Europa, el italiano encontró su lugar en la Premier League inglesa y ganó por primera vez una liga de primera división.
Inesperado, claro, si se piensa que fue despedido de la selección de Grecia con sólo cuatro partidos en la banca, cosechando tres derrotas y un empates. La directiva balcánica no soportó ver como su escuadra caía 1-0 con el débil combinado de Islas Feroe y lo cesó de su cargo, lo que dio paso para que llegara a los Foxes con la misión de asegurar la permanencia en la primera divisón de Inglaterra. Misión que quedó atrás cuando empezaron a sorprender y que se coronó con el título.
Pero antes de conseguir por primera vez una liga, el italiano recorrió un largo camino. Más atrás de las experiencias en Leicester y Grecia están las historias del romano en Mónaco, Inter de Milán, Roma y Juventus. Al final, siempre dejó el cargo por no alcanzar los altos objetivos que cada uno de los clubes se pone en el camino. En el Principado, por ejemplo, ganó la Segunda División, pero luego no pudo repetir el título en el fútbol de honor.
Ahora el contraste es total. Y es que hoy todo es dulce en la vida del peninsular. Al inesperado título en Leicester, se sumará el incremento que tendrán los números de su cuenta corriente. Y con razón, pues en un principio él negoció los premios con el mínimo objetivo de conseguir la permanencia. De hecho, Ranieri recibiría 150 mil dólares de bonificación por cada casilla que supere el puesto 17 de la liga. Pero el técnico italiano también fue precavido y negoció un millonario premio de 5 millones de libras esterlinas por ser campeón.
Ranieri pavimentó desde su llegada la ruta a ganar su primera liga. Ahora, a los títulos que tenía en 29 años de carrera –una Copa Italia (1995-1996) y una Supercopa de Italia (1996), con la Fiorentina; una Copa del Rey (1998-1999), una Intertoto (1998) y una Súper Copa de España (2004), con Valencia; y la Segunda División francesa, con Mónaco (2012-2013)- se suma la prestigiosa Premier League.
GRAF/LRT-GP