A tan solo días de la toma de posesión de la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump puso en marchas nuevas medidas que dan un giro radical a la política del país. Entre la derogación de los 78 decretos de su antecesor el tema migración tuvo su lugar.
La deportación de miles de migrantes es un hecho. Pero el presidente de Colombia, Gustavo Petro, manifestó su negativa a la llegada de aviones militares con migrantes deportados territorio a colombiano.
Y Donald Trump no tardó en pronunciarse al respecto. Rápidamente anunció una serie de medidas de represalias en contra del Gobierno colombiano que, incluye el aumento de aranceles y la prohibición de viaje.
A través de Truth Social el mandatorio norteamericano se dirigió a Gustavo Petro: “Me acaban de informar que, a dos vuelos de repatriación desde Estados Unidos, con un gran número de delincuentes ilegales, no se les permitió aterrizar en Colombia. Esta orden fue dada por el presidente socialista de Colombia, Gustavo Petro, que ya es muy impopular entre su pueblo”.
Colombia entre la espada y la pared
Según se dio a conocer, el Gobierno de Donald Trump firmó la deportación de 538 personas en situación migratoria irregular. Y la negativa del presidente colombiano tuvo sus consecuencias. Una de ellas es la imposición de aranceles del 25% de los bienes que ingresen a territorio estadounidense, el cual en una semana subirán al 50%.
Asimismo, estableció la prohibición de viaje y revocación de visas para funcionarios del Gobierno de Gustavo Petro. En cuanto a los familiares, también se verán salpicados por las medidas: “Sanciones de visas a todos los miembros del partido, familiares y partidarios del gobierno colombiano”.
De acuerdo con Donald Trump, este es tan solo el comienzo de las represalias que recibirá el Gobierno de Colombia: “¡No permitiremos que el gobierno colombiano viole sus obligaciones legales con respecto a la aceptación y el regreso de los criminales que obligaron a ingresar a los Estados Unidos!”.