Elon Musk se mantiene al frente de Tesla Motors, pero a veces dudamos cuánto tiempo vaya a durar su imperio. La compañía se encuentra en uno de los momentos más complicados de su historia reciente en términos financieros y el magnate al parecer está queriendo apostar todo el futuro de la compañía en un proyecto demasiado futurista: que la firma se dedique ahora al potencial negocio de los robotaxis.
Suena como algo disparatado pero hace poco fuimos testigos de cómo Musk, en un desplante característico de su personalidad y que ya vimos en más de una ocasión manifestarse así durante su periodo como CEO de X, antes Twitter, terminó matando por completo el proyecto del Model 2 de Tesla, para mejor enfocar de lleno toda la infraestructura disponible a su nueva idea de los taxis autónomos.
¿Pero por qué Elon Musk hizo un movimiento así de drástico para ir por un sector de negocio que ni siquiera se ha probado como rentable? La respuesta es simple: el dinero. Un activo con el que tanto Elon como la propia automotriz cuenta cada vez menos.
Hoy vamos a repasar la historia loca de Elon Musk, el Model 2 y su apuesta por los taxis que se conducen solos.
Elon Musk parece que no ha matado su proyecto de robotaxis
Todo empezó el pasado mes de abril de 2024, cuando Elon Musk, en su rol como CEO de Tesla Motors, generó bastante revuelo en la comunidad tecnológica tras usar sus redes sociales oficiales para anunciar el desarrollo de lo que podríamos denominar como un Tesla Robotaxi, programado para presentarse el 8 de agosto de este 2024.
Todo sucedió bajo un marco de absolutas contradicciones, ya que este anuncio por parte del millonario surgió exactamente luego de la publicación de un reportaje de la agencia informativa Reuters en donde se afirmaba que la empresa de coches cancelaría el desarrollo del esperado Model 2.
Para quienes no lo conozcas, el Tesla Model 2, que no tiene un nombre oficial aún, no sería otra cosa más que un vehículo eléctrico básico de bajo costo para consumidores con un presupuesto más limitado para gastar. Sin embargo en medio de esa crisis financiera y la muerte del coche Elon anunció la fecha oficial para la presentación de su proyecto de los robotaxis.
Wall Street reaccionó y obligó a Elon a confirmar el Model 2
La noticia causó turbulencia en el sector pero particularmente entre los inversores de Wall Street, quienes llegaron al punto de manifestar directamente que no reaccionarían de manera positiva contra Tesla Motors si Elon Musk no confirma directa y frontalmente que el Model 2 seguía existiendo.
Debido a que el proyecto de robotaxis usaría la infraestructura de fábrica dedicada a ese proyecto del coche económico entonces Musk se vio en un encrucijada: o se quedada con su idea del futuro o seguía el plan y mantenía felices a quienes mantienen viva a su empresa.
Al final esta respuesta fue la que dio el millonario en la llamada a inversionistas para comunicar los resultados financieros del primer trimestre de 2024: “En términos de una hoja de ruta para nuevos productos, se ha hablado mucho. Hemos actualizado nuestra futura línea de vehículos para acelerar el lanzamiento de nuevos modelos”.
Musk dijo que podríamos ver los primeros autos del Model 2 a principios de 2025, si no es que a finales de este año. Por lo que ahora estamos ante un escenario donde podrían suceder dos cosas.
¿Robotaxis o Model 2? Parece que Elon Musk quiere ambos
Elon anunció la fecha del 8 de agosto de 2024 como la oficial para presentar sus nuevos robotaxis. Es un hecho que el Model 2 está vivo y toda la infraestructura de producción está enfocada a ello para mostrarse a finales del este año o en el siguiente.
Así que existe la posibilidad de que Elon Musk sí realice el evento, pero recorriendo a final de cuentas su calendario de producción, para lanzar los primeros taxis mucho después que el Model 2. Eso explicaría por qué despidió al 10% de su fuera laboral del proyecto de la red supercharger para inmediatamente anunciar una inversión de cientos de millones de dólares en ese proyecto que decapitó.
Pero con Elon Musk nunca se sabe e incluso con todos estos complicados giros de las últimas semanas existen al posibilidad franca de que otra vez cambie todo y marque un nuevo rumbo para su compañía que comienza a naufragar financieramente.