Bajo el imperio actual de las redes sociales, la adrenalina de un reto viral parece atrapar a cualquiera y, a veces, los resultados son nefastos. Sin embargo, como elemento pedagógico fue un hallazgo para el profesor de Relaciones Públicas Matthew Prince, que imparte clases en la Universidad Chapman, California. Al iniciar el semestre, a sus 80 estudiantes de Mercadotecnia para Influencers les planteó un desafío: si alguien podía crear un video en TikTok que recibiera un millón de visitas antes que él, se eximiría del examen final.
No todos lo tomaron con la pasión de Sylvie Bastardo, una estudiante de 20 años que casi por impulso sacó su iPhone y empezó a grabar. Primero hizo un close up a la pantalla. Y bajo las palabras “TikTok Influencer Challenge”, escribió: “El primero en alcanzar el estado viral gana. (Yo contra toda la clase). Si ganas, se cancela el final”.
Al día siguiente, la chica seleccionó una canción como fondo del video de 6 segundos, aprovechando un jingle pegajoso para el pelo que ya circulaba en TikTok. Por último, publicó el video con la lectura “¡Mi profesor dijo que si alguien en nuestra clase lograba tener un TikTok con un millón de me gusta cancelaría el final! ¡Por favor, presionen el botón de me gusta!”.
Más tarde explicó que suponía que la afluencia de “Me Gusta” atraería al algoritmo de la aplicación y ayudaría a que su video despegara. El contador de visualizaciones se disparó gracias a los comentarios positivos y negativos, ya que el algoritmo de TikTok se basa, en parte, en los comentarios. Sólo un día después de subir su video alcanzó el objetivo. Así, al inicio de la siguiente clase Prince la hizo pasar al frente y la clase estalló en un aplauso. Hasta ahora, el video ha recibido más de 7 millones de visualizaciones y Sylvie hizo otro con un seguimiento sobre su éxito, que suma un millón más.
Para conocer el mundo de las redes sociales
En todo caso, el profesor sufrió cuestionamientos de sus colegas, pero el también director de Mercadotecnia y Relaciones Públicas de Taco Bell adujo que quería que sus alumnos conocieran de primera mano las posibilidades de las redes sociales.
“Pensaba en nuevos métodos que respalden algunas de las enseñanzas que intento transmitir en el semestre. La idea de lo democratizada que está la viralidad y la influencia en las redes sociales, concretamente en TikTok, y que no hace falta ser una celebridad para proyectarse”, planteó.
Como es sabido, TikTok permite crear, editar y compartir en otras redes sociales vídeos de 15 segundos. Es la evolución de Musical.ly, una app musical para adolescentes que la empresa tecnológica china ByteDance compró a finales de 2017 por unos 1.000 millones de dólares, la misma cifra que Facebook pagó por Instagram cinco años antes.
En agosto de 2018 fusionó esta plataforma, que ya era bastante popular en Estados Unidos, con Douyin, el nombre de TikTok en China. Desde entonces, sus usuarios han pasado de 100 a más de 500 millones en todo el mundo, y todo apunta que será la red social que más crecerá en todo el mundo en esta década.
Como sea, Matthew Prince no es el único que integra las RR.SS. a los planes de estudio, ya que la Universidad de Duke dicta un curso que enseña a los estudiantes a crear su marca personal en internet. Al fin, de esa forma impensada, hoy el Me Gusta virtual desplazó al anhelado 7 de la enseñanza clásica…