Luego de concretarse anoche su clasificación a la definición de este martes en el estelar de danza “Aquí se baila”, de Canal 13, la bailarina brasileña Francini Amaral respiró aliviada por haber obtenido un logro que si bien no tenía planificado en un inicio, con el tiempo se le fue dando en la medida que fue cumpliendo “con creces” gracias a sus atractivas y sólidas coreografías.
Un logro que llega como corolario al deseo inicial de la bailarina de “pasarlo bien”.
“Es heavy, aún no lo creo que llegué a la final”, reconoció Francini en conversación con hoyxhoy.cl, medio donde la bailarina sinceró hoy que sus favoritos de cara a la final de esta noche eran dos talentos, Tomás González y Chantal Gayoso, que en el transcurso del programa mostraron una evolución que, para bien o para mal de la brasileña, no alcanzaron la definición, que además de Amaral, tendrá a Fernanda Garcés, Emmanuel Torres y el vigente campeón de la competencia, Kike Faúndez.
La sorpresa para Francini en “Aquí se baila”
“Yo pensé que Tomás iba a ganar. Estaba entre Chantal y Tomás, la verdad”, indicó Francini.
“Cuando Tomás fue eliminado no entendí nada, porque nosotros siempre bromeábamos que éramos team González, porque éramos fans de la evolución que Tomás estaba teniendo en el programa. Fue impresionante”, justificó.
“Y la Chantal, para mí es una de las mejores bailarinas que existe en Chile. Amo como baila, su actitud, su técnica, su presencia escénica. A mí me gusta mucho cómo trabaja y yo pensé que iba a llegar a la final”, recalcó la brasileña, quien asumió que su primer gran objetivo de cara a su participación en el programa de Canal 13 era “pasarlo bien”.
“Sí, ese fue el gran objetivo. No quería estresarme, esa es la verdad, no quería sentir la presión que genera una competencia. Por eso lo tomé demasiado ligero todo. No me acuerdo haberme estresado en algún minuto, para mí fue muy placentero. Yo creo que las ganas de ganar empezaron un día antes de la final. Porque con David no creíamos que íbamos a llegar a la final, y cuando llegamos fue como ‘oye, ya estamos acá, hay que darlo todo’. Ahí dijimos ‘ok, es momento de competir, bailemos e intentemos ganar esta cuestión’”, reconoció.
“Es heavy cómo un programa te puede ayudar a enamorarte de nuevo de algo que estaba perdido. Me amarré a un estilo, el axé, por el tema de los eventos, pero bailar otros estilos, explorar movimientos, bailar con alguien (...) fue maravilloso”, finalizó.