El mundo no podía creer cuando los principales medios reportaban que un niño de 5 años había resultado intoxicado con metanfetaminas después de comer los dulces que había recolectado por Halloween.
El niño, identificado como Bryan Carwell, de la ciudad estadounidense de Galion, había salido junto a su padre a recolectar dulces y de regreso a su casa comenzaron a aparecer los primeros síntomas de una intoxicación.
Cuando se sacó el disfraz sus padres notaron que la mitad de su cara estaba paralizada y su cuerpo temblaba, por lo que decidieron llevarlo a urgencias donde finalmente tras un examen de orina confirmaron que el menor había consumido metanfetaminas.
«Sólo había comido un par de dulces. Antes de empezar a temblar se había puesto dientes de vampiro en la boca» contó su padre a los medios locales.
Vuelco en el caso
La policía llegó a la vivienda para periciar los dulces que había recibido el niño, y analizar entre otra cosas el disfraz usado por el pequeño y los elementos que había tocado a su regreso de la recolección de Halloween.
Tras un par de días luego que el pequeño saliera del hospital y luego del anuncio publicado por la policía de Ohio en su cuenta de Facebook para que los padres tuvieran precaución, para evitar nuevas intoxicaciones, los resultados de las pericias policiales llevaron al caso a dar un inesperado giro.
Los efectivos detectaron la presencia de drogas, marihuana y presunta metanfetamina, en la casa del niño y su padre Cambray Carwell dio positivo en una prueba para determinar si había consumido la sustancia.
De esta manera, el hombre fue arrestado y acusado de posesión y consumo de drogas ilícitas.
El jefe de la Policía de Galion, Brian Saterfield, dijo a través de un comunicado que «aunque no podemos decir definitivamente cómo ingirió el niño la metanfetamina, estamos totalmente seguros de que no la ingirió por medio de ningún caramelo de Hallloween».