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La colorida vida pública de Ozzy Osbourne está salpicada de cuentos conocidos de drogas y de alcohol, cabezas de murciélago mordidas y palomas muertas. Sin embargo, recientemente, se trata de un asunto muy público que ha causado un distanciamiento con su esposa y manager de toda la vida, Sharon, dejando al líder de Black Sabbath admitiendo que tiene una adicción al sexo.
Pero no sólo su vida personal está dando que hablar, puesto que al reciente gira de Black Sabbath le ha permitido mostrar que a sus 67 años se encuentra más vigente que nunca a nivel artístico.
El tour, que marca la despedida de los escenarios de la mítica banda, ya ha recorrido varias ciudades del mundo y el próximo 19 de noviembre será el turno de Santiago, cuando Osbourne y compañía aterricen en el Estadio Nacional. La venta de entradas ha sido todo un éxito y, según informa la productora a cargo, sólo quedan algunas localidades disponibles en Andes y Cancha General. El resto está totalmente agotado.
Respecto a esta gira y los shows que vienen, el «príncipe de la oscuridad» conversó con Publimetro.
Ozzy, ya están en el tramo final de la última gira – ¿cómo lo sientes?-
No lo he asimilado del todo. Estoy seguro de que será muy emotivo, una vez que llegue el show final, pero todo tiene que llegar a su fin en algún momento, y ha sido un viaje increíble.
Sabbath se reformó hace cinco años. ¿Ha sido curativo para ustedes?
– No hubo curación necesaria. Nos juntamos como adultos maduros que querían tocar y hacer buena música juntos.
¿Recuerdas cómo te sentiste grabando el primer y todavía icónico y muy bien considerado álbum Black Sabbath en 1970?
– [Recuerdo] la emoción de estar en un estudio real, y tan pronto como habíamos terminado vino la emoción de lanzarlo. Todo era muy nuevo para nosotros.
Hoy en día, los medios de comunicación te llaman el Príncipe de la Oscuridad con afecto, pero por un tiempo en la década de 1980, las personas te atacaban seriamente. ¿Cómo se siente ser llamado un satanista?
– Viene con el territorio. Nunca he sido una persona que se ajuste a las normas así que sólo les dije donde podían meter sus opiniones. No es de extrañar que pensaran que yo era el Príncipe de la Oscuridad.
¿Puedes imaginarte cómo será emocionalmente este último show del sábado en San Antonio?
– Todo el recorrido ha sido una montaña rusa emocional. Aunque el show del que estoy más consciente es el último en Birmingham, Inglaterra. Estoy seguro de que voy a estar nervioso para el de San Antonio, también. Es una gran ciudad de rockeros y como saben no tenía autorización de volver allí por bastante tiempo.
¿Cuáles son tus planes para después de la gira?
– Actualmente estoy jugando un poco con algunas ideas de canciones. Tengo un par de cosas apuntadas y una vez que Black Sabbath deje de estar de gira, estaré entrando en el estudio con mi banda para grabar esas canciones. Una vez que este todo listo pueden estar seguro de que me verán en el camino de nuevo.
Publimetro