Un hombre perseguido por Interpol se arrojó desde el piso 17 de un hotel en la ciudad brasileña de Sao Paulo. El hombre, de 53 años, lo hizo abrazo a su hija de 6. Tanto el nombre de la víctima así como el cargo por el cual lo perseguía la Interpol se mantienen en reserva.
De acuerdo con medios locales, el sujeto escribió una carta antes de adoptar la trágica decisión. “No tengo con quién dejarla que me aporte un mínimo de seguridad y tranquilidad”, fue lo que dejó por escrito en esta misiva en la habitación que ocupaba en el hotel.
En la misma misiva, se informó, también ofrecía disculpas por lo que haría dentro de unos minutos y también se excusaba con el hotel por el “perjuicio” que pudiera causar con su suicidio. También colocó en este mensaje que “esto no hubiera ocurrido en mi país, con mi familia a mi lado”.
Perseguido dejó todo en orden
Según las autoridades, la habitación que ocupaban estaba “en orden” y sin ningún tipo de señal de violencia. La Policía Militar de Sao Paulo no ha precisado aún cuándo el hombre y la niña llegaron en Brasil ni cuál fue el presunto delito por el que su captura había sido solicitada a Interpol.
El perseguido y su hija estaban hospedados en el Hotel San Raphael, en el sector Largo do Arouche. Según informó R7, el padre dijo que no le daría a su hija una vida miserable, ni viviría en la calle con ella. Dijo que accedió a venir a Brasil desde España porque le prometieron un trabajo y documentos limpios. Ahí mismo añadió que habían sido muy felices en los últimos días.