La compañía de telecomunicaciones Mundo, que entrega conexión de Internet y televisión a personas que viven en zonas geográficamente aisladas, sufrió el robo de fusionadoras utilizadas para despliegue de fibra óptica.
La compañía interpuso una querella criminal, en grado consumado, por delito de receptación en contra de un hombre que tenía en su poder dos fusionadoras que habían sido robadas a sus colaboradores en la comuna de La Florida; así como en contra de quienes resulten responsables por la comisión, también en grado de consumado, del delito de robo con intimidación.
Las redes de fibra óptica de última generación están ubicadas en los tendidos de alumbrado público. La instalación de dichos cables requiere la utilización de unos equipos denominados “fusionadoras”, las que tienen un costo cercano a los $3 millones cada una.
Detalles del robo de fibra óptica
El pasado 1° de septiembre, alrededor del mediodía, en calle Doctor Sótero del Río, La Florida, dos técnicos de Mundo fueron abordados por dos sujetos desconocidos, de sexo masculino, ambos en bicicletas, quienes tras amenazar a los trabajadores con armas de fuego, sustrajeron dos fusionadoras, para luego darse a la fuga con paradero desconocido.
Debido a que estos equipos cuentan con localización satelital (GPS), la compañía pudo determinar rápidamente que los equipos sustraídos por los desconocidos habían sido dejados en un domicilio ubicado en la comuna de La Florida. Al día siguiente, personal de la 36a Comisaría de Carabineros de Chile ingresó a la dirección entregada por la empresa de telecomunicaciones, logrando recuperar las dos fusionadoras robadas.
Al momento de ser detenido por Carabineros, el sujeto señaló que los equipos que poseía en su domicilio, habían sido dejados en el inmueble el día anterior para realizarles mantención. “Esta explicación no se sostiene ni por un minuto; no sólo porque el querellado señaló desconocer la identidad de sus clientes, sino que, al mismo tiempo, porque esta supuesta solicitud de mantenimiento no se encontraba respaldada por orden de trabajo o documento alguno”, concluye el abogado.