El próximo sábado 23 de febrero el dictador Nicolás Maduro y el presidente interino, Juan Guaidó, medirán sus fuerzas en la frontera que separa a Venezuela de Colombia, por la distribución de la ayuda humanitaria para Venezuela.
La tensión ha escalado entre ambos bandos y hay dos finales posibles para este enfrentamiento: si Guaidó logra ingresar con la ayuda humanitaria desde Cúcuta, Maduro enfrentará una dura derrota política. Sin embargo, si el líder chavista bloquea la ayuda de EEUU, sin bajas civiles, la estrategia de la oposición de Guaidó tendría que cambiar para finalmente sacar a Maduro del poder.
Pero la pugna entre ambos líderes no sólo está marcada por la ayuda humanitaria. Porque ambos se enfrentarán en otro escenario: la música.
El líder populista convocó a un recital de dos días en el puente Simón Bolívar, el que según dijo, servirá como escenario para la distribución de la «ayuda humanitaria» donada por Cuba y Rusia.
Maduro dispuso que la ayuda se distribuya en territorio venezolano, pese a que el puente une a su país y a Colombia.
El recital aún no confirma su «line up» y sólo se sabe que Maduro está realizando el encuentro com un gallito contra sus opositores.
En la otra vereda y a pocos kilómetros de distancia, en el puente de Tienditas, un paso internacional que también une a Venezuela y Colombia se darán cita los artistas internacionales convocados por el magnate británico Richard Branson, bajo la consigna «Venezuela Aid Live».
Este encuentro ya tiene asegurada la presencia de Ricardo Montaner, Diego Torres, José Luis «El Puma» Rodríguez, Alejandro Sanz y Maluma, entre otros artistas latinos. Su objetivo político no es otro que atraer la atención pública internacional y de alguna manera quebrar la estabilidad del régimen que lidera Maduro.
El recital «Venezuela Aid Live» está convocado para la mañana del viernes 22 y se espera que Guaidó aparezca el día sábado en el escenario, para forzar que los militares, que mantienen bloqueadas las fronteras, permitan el paso de la ayuda humanitaria.
Por ahora, el mundo sólo mira con atención y espera el resultado de esta medición de fuerzas entre ambos líderes para saber que sucederá finalmente con Venezuela.