Ante las imágenes que presentó Canal 13, que mostraban a un grupo de alumnas del Liceo 1 con pañuelos del Frente Patriótico Manuel Rodríguez, el ministro del Interior Andrés Chadwick reconoció manejar denuncias de ese tipo desde abril.
«Hay antecedentes que dan cuenta de que hay nombres de personas adultas que son como una suerte de coordinadores e inspiradores de un grupo e niñas en dicho liceo. Y que pueden tener o han tenido vinculación con antiguos movimientos de tipo violento, como el FPMR», sostuvo el secretario de estado.
«De las imágenes que uno ve y ha conocido, además de la forma que también conoce de los grupos extremistas, esto obedece a formas de adoctrinamiento y reclutamiento de jóvenes», añadió Chadwick.
Después de conocerse que las fotografías fueron realizadas en un contexto académico, diputados de oposición interpretaron los dichos del titular de Interior como una maniobra política. «Con este último espectáculo del gobierno ha quedado claro que Aula Segura no es un proyecto de educación ni de seguridad, como pensamos en un momento. Sino que es un proyecto de la secretaría de comunicaciones del gobierno. Este proyecto no tiene como objetivo la seguridad en el aula, sino que generar una polémica con la oposición. El tema de la violencia en los colegios es lo suficientemente serio como para que ellos se dediquen a hacer jueguitos y montajes», dice Gonzalo Winter, diputado del Movimiento Autonomista.
«Aparece el Ministro del Interior como vocero de uno de los montajes más rascas, ordinarios e indecentes de los últimos años, sacando fotos del instagram de unas adolescentes para decir que son del FPMR. El ministro tiene los antecedentes, que los de a conocer. Lo que no puede decir es que en realidad, por fines de la investigación, no los puede entregar. Él decidió sentarse a contarle al país de los vínculos del Liceo 1 con el FPMR», añade Winter.
Leonardo Soto, representante del Partido Socialista en la cámara baja, añade: «El gobierno está intentando utilizar esta información para generar una sensación que no existe. En Chile no existen partidos políticos, movimientos ni grupos que establezcan como método medios violentos. Chile es una sociedad absolutamente pacífica. Lo que hace el Ministro es, a partir de esta información sesgada, es construir una imagen distorcionada de la realidad. Hoy no hay grupos violentistas actuando en el país. Pueden haber algunas personas que, en el marco de tomas y marchas cometen delitos, pero eso ha existido en todos los países del mundo».
Jaime Bellolio (UDI), por su parte, separa el proyecto Aula Segura de las denuncias de apoderados del Liceo 1 Javiera Carrera. «De ser efectivo está lógica de adoctrinamiento, obviamente es algo complicado en el sentido de que hay grupos extremistas de izquierda que siguen justificando la violencia como método legítimo para el accionar en cualquier forma. No tiene absolutamente nada que ver con la aprobación de aula segura, ese proyecto tiene una connotación diferente y es más sencillo: dice que cuando hay violencia extrema en una escuela, lo que debe hacer el director de la escuela es expulsar a ese estudiante. Porque esa violencia extrema es la que quiebra a la comunidad escolar», sostiene.
«Ese adoctrinamiento o no, que puede ser desmentido, da lo mismo: lo clave es que hay algunos al interior de distintos liceos que justifican las acciones violentas, que implican incluso asesinar profesores. Y eso debe ser erradicado de inmediato», agrega Bellolio.