El virus de la irregularidad podría haber infectado al Instituto de Salud Pública. Así al menos lo anunciaron desde esta misma institución, que notó que entre 2015 y el año pasado se habrían pagado más de $2.100 millones por contratos respecto de los cuales no hay constancia de haberse recibido la totalidad de los productos acordados.
El hecho fue advertido a nivel de la dirección, pues el 29 de marzo Judith Mora, la jefa subrogante de esa institución, tuvo problemas para implementar un proceso informático que se refería al ítem «platas». Para saber qué sucedía, ordenó una investigación interna pero también una auditoría externa. Fue así cuando los investigadores dieron con un eventual «germen» de la corrupción. Por lo mismo, este viernes se entregaron todos los antecedentes a Contraloría para que realice la investigación.
Familiares de la subsecretaria
Pero no es todo. Una de las cosas que llamó la atención es que los pagos sin contrato claro se celebraron con empresas como Plataforma Group S.A, Soluciones Informáticas Integrales Ltda, Sistema de Comunicaciones y Eléctricos LTDA, Integración de Tecnologías ITQ Ltda y Energeia SPA.
Ahí las alertas se encendieron pues «durante el proceso de investigación interna se detectó que en dos de las empresas investigadas tiene participación Roberto Narbona Haschke: Plataforma Group S.A, con contrato desde mayo de 2016 y Soluciones Informáticas Integrales Ltda, con contrato desde enero de 2017. El señor Narbona es primo de la subsecretaria de Salud Pública, Paula Daza Narbona, quien al conocer esta información entrega su respaldo a la directora (s) y ratifica que deben tomarse todas las medidas necesarias, con la mayor celeridad posible, para esclarecer estos hechos», según un comunicado entregado por el ISP.
El mismo texto aclara que «para la Subsecretaría de Salud Pública la transparencia y probidad son intransables».
Cabe mencionar que la próxima semana se presentarán todos los antecedentes al Ministerio Público.