Un joven murió este miércoles durante una multitudinaria protesta en Caracas contra el presidente venezolano, Nicolás Maduro, elevando la indignación por una escalada de violencia que según cifras oficiales deja 38 fallecidos en 40 días de manifestaciones.
Miguel Castillo, de 27 años, falleció por herida de arma de fuego -informó la Fiscalía- tras participar en la movilización de miles de opositores, que resultó en fuertes choques con policías y militares.
Varios manifestantes fueron impactados por ráfagas de bombas lacrimógenas que los cuerpos de seguridad lanzaron desde camiones blindados contra la marcha en la principal autopista de Caracas.
Con escudos improvisados de madera y metal, el rostro oculto con pañuelos, capuchas y máscaras antigases, un grupo de jóvenes, al frente de una multitudinaria manifestación, respondió con piedras, cócteles molotov y de pintura, y algunos incluso lanzando excrementos, en una estratégica vía del este de Caracas.
Al conocer este fallecimiento, el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, condenó «la brutal represión».
Líderes opositores acudirán el jueves en Caracas a actos en memoria del último fallecido y convocan a marchar el viernes en «todo el país».
«El día de mañana a las 10.00 de la mañana (14.00 GMT) estaremos acompañando a la comunidad del Colegio San Ignacio de Loyola», donde estudió «el joven asesinado hoy, Miguel Castillo, quienes van a caminar hasta el lugar donde lamentablemente cayó muerto», dijo la diputada opositora Delsa Solórzano en rueda de prensa según recoge agencia EFE.
La víctima fatal se suma a la muerte de un hombre de 32 años, conductor de un mototaxi, quien falleció ayer luego de que el lunes resultó herido en la cabeza por un arma de fuego “cuando se registraba una manifestación” en una calle de Mérida, en el oeste del país.
