Más de 350 mil aves fueron sacrificadas por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG). El foco de influenza aviar detectado en la planta de engorda de pavos de Agrosuper en Quilpué no solo causó estragos en la industria sino que despertó una serie de interrogantes con respecto a los riesgos para la salud humana. Pese a la alarma que despertó el hallazgo en nuestro país, desde el Ministerio de Salud fueron claros en enfatizar que no existe riesgo para la salud humana.
“Esta es una emergencia en el ámbito de la salud animal. En el mundo, todos los días se encuentran focos de este virus en aves. Ellas son reservorios normales de esta gripe, pero en este caso no existe riesgo para la salud humana”, explicó a Publimetro el jefe de Zoonosis del Ministerio de Salud, Carlos Pavletic.
Para convertirse en un riesgo para los humanos, esta cepa debe sufrir una mutación que la adapte a nuestro organismo, hecho que por la baja patogenicidad hallada en los pavos de Quilpué equivale a una mínima probabilidad.
“Potencialmente todas las cepas de influencia aviar y porcina pueden infectar al hombre, pero se convierten en un problema de epidemia cuando se adapta a él”, advirtió.
Desde el Ministerio se encuentran monitoreando el cumplimiento de las normas de seguridad y haciendo un seguimiento de aquellos trabajadores que tienen mayor contacto con las aves. “Los mas expuestos son quienes trabajan con los planteles, por lo que hemos mantenido un sistema de vigilancia en el que a cualquier persona con síntomas sugerentes se le hacen todos los exámenes”.
Pavletic explicó que las aves son un reservorio normal de este virus, el cual afecta principalmente a ejemplares acuáticos de extensos trayectos como gaviotas y patos. “Es natural que las aves se infecten, para el caso del contagio de los pavos, estos se produjo por que el virus vulneró el sistema de bioseguridad de la planta, los que por lo demás no son infalibles”.
PM / SV
