El técnico Martín Lasarte vivió una extraña salida del Al-Ahly de Egipto el pasado domingo, luego de la eliminación de su equipo en los octavos de final de la Copa local. A pesar de ser campeón en el último torneo egipcio, el ex entrenador de Universidad de Chile fue cesado de sus funciones y de inmediato fue señalado como opción para regresar al club laico, considerando que la propia concesionaria Azul Azul lo había tenido como candidato para reemplazar al despedido Alfredo Arias, gracias a su extenso conocimiento de la institución.
Pese a lo anterior, el adiestrador uruguayo descartó desde El Cairo esta opción, manifestó que no ha existido ningún tipo de llamado desde el Centro Deportivo Azul y advirtió que, hoy por hoy, la U necesita tener un ambiente de tranquilidad para evitar la posibilidad del descenso y que por eso la alternativa de mantener al DT Hernán Caputto aparece como la solución más lógica.
Junto a eso, el también ex entrenador de Universidad Católica aprovechó de anticipar el Clásico Universitario 189 de este domingo (15:00 horas) en el Estadio Nacional. Aunque Machete reconoce que los cruzados son favoritos gracias a su buen momento, la U tiene una oportunidad de oro para vencer a un clásico rival y así terminar, de una vez por todas, con el fantasma del descenso a la segunda división.
¿Cómo se dio su salida del Al-Ahly, porque no se entiende, considerando que era el campeón vigente?
Yo, en realidad, no te sabría decir una razón real, porque no la sé. Nosotros ganamos el campeonato anterior en la penúltima fecha y el clásico, que es muy importante acá, y la gente estaba muy contenta. Debutamos en la Champions de África y ganamos 4-0, y perdimos un partido por la Copa local, que era eliminatorio. Perdimos 1-0, en un partido parejo y con 10 jugadores. No fue que nos golearon o que jugamos muy mal, pero bueno, acá el concepto es que este equipo tiene que ganar siempre, tipo Boca, River, la U, Colo Colo, Peñarol o Nacional, ese concepto. Pero yo digo, ganar siempre, siempre, no se puede. Y este club, siempre, siempre, no ha ganado, pero es una realidad. No sé si influyen las redes sociales tanto después de la derrota, si tuvo influencia eso, pero había un ambiente enrarecido y nosotros no tenemos nada que reprochar, cada uno toma las decisiones que quiere. A nosotros nos trajo el gerente y nos dijo que habían decidido dar un golpe de timón, que había que aceptarlo y punto, sin más. No hay que clavarse clavos o lastimarse, porque es es sólo un trabajo, en el que sabemos que lo hicimos bien y estamos muy tranquilos.
¿A qué se refiere con ambiente enrarecido?
Fueron comentarios en la prensa, de algo que dije en un diario español, donde comenté que el campeonato había sido muy difícil, porque nosotros llegamos y el equipo estaba 17 puntos atrás del primero, con algunos partidos menos, pero terminamos saliendo campeones con seis puntos de diferencia. Entonces, me parece que hicimos un trabajo fanástico. Había 14 lesionados y ahora hay sólo tres por operaciones, les dimos oportunidades a jugadores que no jugaban para proyectarlos nuevamente, pero había un ambiente raro, porque no les gustó lo que dije. Decían que «en este club nada es difícil» y eso es lo que escuché, me llamó mucho la atención que se enojaran por esa referencia, que no fue ni mía, sino que la hizo un periódico.
¿Algún conflicto con la dirigencia por parte de usted?
Ninguno. Te lo diría, pero no tuvimos ningún conflicto.
Ha pasado con técnicos chilenos que también tienen salidas sorpresivas de ligas asiáticas o africanas. ¿Por qué cree que pasa eso?
Mi única experiencia anterior fue en Dubai y la verdad es que sustuí a un colega y no tuve problemas, pero sé de compañeros que tienen muchos.
Opción de la U y Caputto
Algunos medios lo vincularon con la U tras su salida, porque desde Azul Azul confirmaron el interés por usted como posible nuevo entrenador. ¿Lo llamaron?
A mí no me ha llamado nadie, simplemente un colega tuyo me llamó para preguntarme cuál era mi situación y yo dije que era buena, porque acabábamos de salir campeones, pero conmigo no habló nadie y no te puedo decir mucho más.
Desde la dirección deportiva confirmaron que usted estaba en carpeta, porque necesitaban un DT conocedor de la U. En ese sentido, ¿volvería al club en una situación del descenso, como está?
Estoy al tanto de la situación, pero la U es un grande y es un hecho motivamente trabajar en un equipo como ése. Hablamos de un equipo que lleva 25, 30 ó 35 mil personas en un partido, entonces, eso es motivación y un objetivo. Para ellos, el objetivo inmediato es salir de la situación delicada y poner un poco de tranquilidad, para tomar una nueva decisión más adelante. Asumo eso a la distancia.
Sin duda, pero ¿usted asumiría algo así?
O sea, para mí el fútbol no tiene misiones sencillas, porque ser campeón, salvarse del descenso o clasificar a una copa internacional es todo difícil. Cada club apunta a objetivos, según el diagnóstico que hace. Hoy la realidad de la U es complicada, por lo tanto, el objetivo para Hernán Caputto será salvarse de la situación delicada, primero que todo.
Sé que no lo han llamado, pero ¿si es que se diera?
No, a mí no me llamó nadie, pero todo depende de cuál sea el proyecto. Estamos casi en septiembre, faltan octubre, noviembre y diciembre para que termine el torneo, cuatro meses solamente, ¿y te van a ofrecer cuatro meses de trabajo? Me parece medio raro para cualquiera.
¿Usted no lo asumiría?
Es que es raro para cualquier colega. No lo agarraría porque es un riesgo muy grande sólo por cuatro meses y si sale mal la cosa, todo mal, te haces puré todo y por eso creo que tiene que haber un respaldo. De partida, tiene que haber un proyecto un poco más ambicioso, saber que si van a llevar a un entrenador, va a ser para salvar la situación. Como eso se va a salvar, puede haber nuevos proyectos, pero sólo por cuatro meses no, me parece que debería ser algo más.
Lo que hace Azul Azul es mantener a Caputto porque está dentro del club. ¿Qué opina de eso? ¿Sería bueno mantenerlo hasta fin de año?
Es una situación favorable, porque es alguien que estaba dentro del club, que lo conoce y también a los jugadores. Tomando en cuenta que cesaron a Alfredo Arias y había que poner a alguien rápido, lo más fácil era alguien de adentro, es lógico, porque los partidos no cambian y hay que jugarlos. Es algo que habitualmente se hace.
Sí, se usa. Ahora él ganó y empató un partido. Por eso, ¿debería la U ratificarlo hasta diciembre, para darle tranquilidad al equipo?
Yo no sé lo que conversaron los dirigentes con él, porque capaz que ellos le dijeron «queremos que dirijas dos o tres o cinco partidos», o que lo querían hasta diciembre, eso no lo sé. Evidentemente, el entrenador tiene que estar de acuerdo con lo que se le ofreció.
Se le ofreció que dirigiera un par de partidos, pero ahora tiene evaluación semanal. ¿Cree que está bien eso y no ofrecerle algo hasta fin de año, al menos?
Es muy difícil esto, porque la U está en una situación delicada, que no es fácil para nadie, para el entrenador, para los jugadores, para los dirigentes, para los gerentes ni para la hinchada. Está todo mal y albortado, por eso creo que hay que poner un poco de calma. La U tiene un buen equipo, no es malo, por lo menos para salir de la situación en la que está. Por eso hay que tratar de darles confianza a los jugadores, tratar de establecer una idea simple, sencilla, que la entiendan fácil y que les guste, que se sientan confiados. Yo creo que Caputto apuntó a eso en los últimos dos partidos, que yo no vi. ¿Ahora toca Católica?
Sí, por eso, según su opinión, ¿no es importante darle la tranquilidad total al técnico?
Capaz que le dijeron que cuando encontraran un entrenador que les parezca bien lo van a traer, entonces, yo no sé bien lo que le dijeron a él. Sé que lo pusieron de interino y no sé qué será mejor o peor, pero es una situación delicada y yo soy entrenador, no directivo, ellos piensan en otras cosas.
Clásico Universitario 189
Juegan la U y la UC en el Estadio Nacional y usted, que dirigió a los dos elencos, es voz autorizada…
Sabes que quiero destacar que Católica lleva casi una década, entre triunfos y derrotas, en un nivel muy alto. Tati Buljubasich y el club trabajan muy bien, son muy serios, muy inteligentes y yo me alegro mucho que les vaya bien, más allá de que no me gusta que a la U le vaya mal, porque ahí pasé un tiempo precioso y no me gusta ver donde está, pero a la Católica es difícil enfrentarla.
¿Cómo ve este clásico tan diferente en realidades?
Los clásicos tienen un reglamento distinto, es como decirte que no hay favoritos y eso pasa en todos lados. Cuando hay un clásico y alguno viene de favorito, es todo distinto, porque está la pasión, la historia, los jugadores, la manera en que juegan este tipo de partidos. No responde a un favoritismo previo. De repente a la U le viene bien, saca un partido con un buen resultado y le sirve para salir adelante.
Si gana la U, ahí sí que tendrían que ratificar a Caputto hasta fin de año…
Por eso te digo, a veces está eso y también hay que considerar que es un partido muy complicado, y tampoco quieren quemar a Caputto, porque a él lo trajeron para formar jugadores y tiene que quedarse en el club. Hay que pensar en eso también.
¿Quién es el que más pesa en este tipo de clásicos? ¿La U o la Católica?
Todo influye. Influyen los momentos, como el de Católica, que está mejor que la U. Influye la historia. Existe la estadística, que hay que manejarla, una en el Estadio Nacional y otra en San Carlos. Hay que ver los jugadores a los que les ha ido bien y mal en los clásicos, los que ganan estos partidos, todo. ¿Los medios dan por favorita a Católica?
Sí, absolutamente, porque hay 24 puntos de diferencia en la tabla y en el juego es superior la UC…
Ahí está. Esos puntos hacen que sea favorita, pero eso puede terminar siendo un peso para Católica y que a la U le signifique una cosa liviana, porque dicen «tenemos mucho más para ganar que para perder». Más allá de que siempre tiene que ganar la U, pero quizá la U hace un buen primer tiempo, hace un gol y lo defiende, entonces, estas cosas no recorren las líneas de la normalidad, son diferentes y difíciles.
¿Usted prefiere a alguno de los dos por sobre el otro?
No, para nada. Quiero que gane el fútbol y que le vaya bien a la gente con la que uno trabajó, siempre me pongo triste cuando les va mal. Me pongo contento cuando a la Católica le va bien, pero triste cuando a la U le va mal. Quiero que a la U le vaya bien también, porque es gente que uno conoce, soy amigo de muchos funcionarios de ambos equipos, porque yo soy cooperativo y de grupo. Hoy a Católica le va mejor y deseo que a la U le vaya bien para que pueda mejorar.
¿Se la juega con algún resultado?
Para mí, pasa que el resultado más evidente en los clásicos es el empate. Sé que no me juego mucho, pero los clásicos tienen un recorrido diferente.