Tras jugar en once países y en 27 clubes diferentes, el uruguayo de Magallanes Sebastián Washington Abreu sabe y conoce una infinidad de canchas. A sus 41 años es una toda una leyenda activa del fútbol y por lo mismo, es voz autorizada para evaluar el estado de algunos pastos del torneo del Primera B, donde conviven estadios Bicentenario y otros, un poco cercanos a la realidad potreril.
Tras el encuentro del pasado domingo entre San Marcos de Arica y Magallanes, que finalizó empatado a uno, el ex atacante de Puerto Montt no dudó en manifestar su opinión al término del partido: «Se están dando justo dos coincidencias de dos fines de semanas seguidos, hay canchas muy malas, con viento, dos equipos que pelean el descenso (…). No es lo que queríamos, uno entrena para otro tipo de campos, pero bueno, es lo que hay, hay que adaptarse».
De todas maneras, Abreu manifestó su conformidad por el empate, debido al estado del campo de juego: «Cuando no se puede ganar, es importante sumar, tomando en cuenta que estamos encima de Arica en esta primera lucha del descenso».
Este es el segundo partido del uruguayo en Magallanes, con un solo gol marcado durante la fecha pasada ante La Serena de local, donde empataron 2 a 2.