Carlos Carmona fue el primer nombre que el entrenador Pablo Guede entregó en la lista de refuerzos para la temporada 2018. El técnico quería a un volante de contención de categoría para poder encontrar un mayor equilibrio en el equipo y tras una larga negociación, la dirigencia le cumplió.
Y el técnico del Cacique no estaba equivocado puesto que en el que fue su primer clásico en el país, Carmona simplemente brilló y fue clave en la victoria ante Universidad Católica. El oriundo de Coquimbo fue el eje entre la defensa y ataque. Se retrasó cuando quedaban mano a mano y apoyó a Matías Zaldivia y Juan Manuel Insaurralde.
En el mediocampo fue un patrón que estuvo bien en la marca, entregó casi siempre con seguridad la pelota e incluso se animó en vocación ofensiva.
Como buen «6» también recurrió a las faltas y pierna fuerte en más de una ocasión, de hecho en una jugada estuvo a punto de irse expulsado tras entrar con fuerza desmedida ante Diego Rojas.
Carmona bloqueó en varios pasajes el juego del propio Rojas y Diego Buonanotte quien poco a poco fue perdiendo la paciencia ante la asfixiante marca del volante albo.
El ex seleccionado nacional respondió a las expectativas y cumplió una gran labor en lo que fue su primer gran clásico en el país.