No la ha tenido fácil Arsene Wenger en las últimas semanas. Ahora, tras la apabullante caída ante Bayern Munich y que dejó al Arsenal prácticamente fuera de la Champions League, el técnico francés reconoció que “todo se derrumbó”.
En el análisis del trámite aseguró que el equipo colapsó en el segundo tiempo porque “perdimos a Koscielny rápidamente”.
«De repente todo se derrumbó. Fue difícil, y nos venimos abajo mentalmente. No busco excusas, pero estábamos sólidos en defensa hasta el segundo gol”, agregó el DT de los Gunners.
“Después del entretiempo tuvimos dos grandes chances para quedar 2-1 arriba. Al volver a la cancha jugamos bien. Tuvimos mala suerte en el segundo gol. En general, ellos son mejor equipo que nosotros, jugaron muy bien en el complemento y nosotros bajamos el nivel”, complementó.
Wenger, quien se mostró “decepcionado”, reconoció que dependen de un milagro «pero primero debemos recuperarnos y luego pensar en el próximo partido».