Querían llenar a los británicos de orgullo por el diseño del que será el segundo rascacielos más alto de ese país, pero lo que obtuvieron fueron sólo burlas por el parecido de la construcción con un juguete sexual.
La empresa a cargo del diseño de la obra dio a conocer la proyección del edificio y los vecinos al sector de Croydon, en Londres, donde va a estar emplazado sólo pudieron afirmar que lucía igual que “un vibrador de conejo”.
El rascacielos de 236 metros llamado One Landsowne Road contará con 800 pisos, en las que se abrirán oficinas, un gimnasio, restaurante, hoteles y tiendas.
Según los planificadores, los enormes rascacielos, se completarán en 2022 y son «increíblemente hermosos» y «visualmente llamativos” y se convertirán en «mundialmente famosos”.