Luciano Cruz-Coke, exministro de Cultura y sobrino de Marta Cruz-Coke, la primera mujer Directora de la Dibam, expresó un conmovedor mensaje tras el fallecimiento de su tía a los 99 años. Marta Cruz-Coke, reconocida por su destacada labor como creadora del Día del Patrimonio, dejó un legado invaluable en el ámbito cultural.
En la madrugada del sábado 20 de mayo, se confirmó la triste noticia del deceso de Marta Cruz-Coke. Ante esta pérdida, Luciano Cruz-Coke utilizó las redes sociales para rendir homenaje a su tía y destacar su destacado legado.
Junto a una imagen de ambos, el exministro de Cultura inició su mensaje recordando los logros de Marta Cruz-Coke, resaltando su papel como primera mujer Directora de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos, y su contribución como fundadora de la Corporación del Patrimonio Cultural de Chile y del Patrimonio Religioso. Además, señaló que también fue directora del colegio La Maissonette.
“Mujer de profunda fe y gran defensora del valor de la familia. Siempre puntual y gran organizadora de nuestra breve pero inquieta familia, la última de tu generación. Hoy vas a juntarte con tu admirado padre Eduardo y tú madre Marta. Que tu ejemplo sea guía para todos los que te hemos querido”, escribió su sobrino.
El legado de Marta Cruz-Coke
Marta Cruz-Coke, destacada como Directora de la Dibam y la Biblioteca Nacional de Chile, dejó un legado en el ámbito cultural. Fue reconocida con el Premio Nacional de Conservación en 2000, el Premio Nacional a la Gestión Cultural en 2012 y nombrada Hija Ilustre de Santiago en 2017.
En 1993, Marta Cruz-Coke se convirtió en la primera mujer Directora de la Dibam, tras la renuncia del anterior director, Sergio Villalobos. Bajo su liderazgo, presentó a Valparaíso como candidata a Patrimonio de la Humanidad ante la Unesco en 1995 y estableció el programa Bibliometro en 1996, una de las bibliotecas públicas más grandes de Chile.
Además de su destacada labor cultural, Marta Cruz-Coke tuvo vínculos políticos. Su padre, Eduardo Cruz-Coke, fue senador, su esposo, Gustavo Lagos, fue ministro durante el gobierno de Eduardo Frei Montalva, y su sobrino, Luciano Cruz-Coke, también fue ministro de Cultura y diputado.
Marta Cruz-Coke también dejó huella como educadora, estudiando junto a Aída Larraguibel, quien introdujo la educación Montessori en Chile. Se desempeñó como directora de La Maisonnette y profesora en el Saint George.