Sin duda la noticia de este fin de semana fue la performance que se realizó en un acto por el Apruebo en Valparaíso, donde el colectivo “Las Indetectables” mostraron en pleno escenario un acto sexual con una bandera chilena. Eso, sin importar de que se tratara de una actividad familiar a la cual llegaron unas 3.000 personas.
La intervención ha sido fuertemente criticada, cuestionada y condenada transversalmente. Incluso la Fiscalía abrió una investigación.
Pero este estilo ya había sido mostrado con anterioridad, en Santiago durante el 2019. Según indagó Radio Biobío, en octubre, durante el estallido, junto a otros colectivos denunciaron “mediante el desnudo la violencia de los desaparecidos, asesinados y torturados en las últimas protestas”, en un acto denominado DESperformance.
Pero “Las Indetectables” fueron más allá y se dirigieron al frontis de la Universidad Católica para desplegar un lienzo con la leyenda “La Dictadura sexual nunca terminó”.
Dictadura Sexual: polémica por protesta con vibradores en frontis de la Universidad Católica
Según Registro Contracultural, se unieron a la artista Irina La Loca y los trabajadoras sexuales Vesania y José Carlos Enríquez, para realizar una “acción relámpago pornoterrorista”. En esta intervención usaron juguetes sexuales para penetrar a dos de los participantes de la performance mientras desplegaban una bandera chilena, al tiempo que orinaban la estatua del arzobispo de Santiago e historiador, Crescente Errázuriz.