Durante la jornada de este miércoles 16 de octubre el Senado aprobó la destitución por acusación constitucional, de los magistrados de la Corte Suprema Sergio Muñoz y Ángela Vivanco, siendo la más polémica, la que terminó con la salida del máximo tribunal del juez Muñoz.
Ambos jueces fueron destituidos aludiendo a un “notable abandono de deberes”, pero por hechos totalmente distintos, motivo por el cual varios parlamentarios criticaron, entre otras cosas que la Cámara de Diputadas y Diputados haya aprobado ambas acusaciones constitucionales en una sola votación.
Así, también hubo sectores de la izquierda y del oficialismo que no dudaron en señalar que la destitución del magistrado Sergio Muñoz se produjo a modo de “empate”, ya que fue juzgado por hechos ocurridos hace dos años, mientras que Ángela Vivanco fue señalada por su vinculación con el denominado “Caso audios”.
Qué dijo el Presidente Boric
En ese sentido, durante la jornada de este jueves 17 de octubre, el Presidente Boric hizo una declaración desde La Moneda para referirse a lo ocurrido.
“Nuestro gobierno, por cierto, es respetuoso de las atribuciones de otros poderes del Estado”, comenzó señalando el Mandatario, añadiendo un llamado a “reflexionar sobre esta decisión y advertir sobre los efectos complejos y nocivos que puede acarrear para la democracia el mal uso que se puede hacer de las instituciones”.
Luego puso énfasis en que “resulta insólito y, a mi juicio, inexplicable que la Cámara de Diputados haya decidido dar curso a una acusación constitucional a dos jueces de la Corte Suprema por hechos totalmente distintos en una sola votación”.
“Y respecto al fondo, utilizar las acusaciones constitucionales contra un juez como un medio oblicuo para enjuiciar sus sentencias del pasado o la manera de comprender el derecho por parte de alguno de ellos, sienta un precedente que es muy peligroso”, agregó el Presidente.
El Mandatario además destacó que “el Poder Judicial debe estar exento de todo tipo de influencia externa, política o económica que pueda afectar la independencia de decisión de cada juez”, continuó, el cual “debe ejercer su labor sin temor a la venganza de los litigantes”.
En esa misma línea, agregó que “es tiempo de cuidar nuestras instituciones. Utilizar las acusaciones constitucionales, en este caso contra un juez con argucias procedimentales, puede terminar por dañar su indispensable independencia. Hay momentos en que la contingencia nos impide observar el daño que ciertas decisiones políticas y protagonismos ocasionales le pueden provocar a las instituciones permanentes de la República”.
Finalmente cerró su declaración apuntando que “tengo la convicción personal e institucional que debemos ser firmes e implacables contra la corrupción y todo tipo de privilegio injusto, venga de donde venga, sin importar color, posición social ni posición política (...) Todos, en particular quienes tenemos cargos de responsabilidad pública y también quienes tienen cargos de responsabilidad privada, tenemos el deber de reflexionar de buena fe sobre el bien común de nuestra patria y cómo actuar en consecuencia”.