El caso, que está siendo indagado por la Brigada de Delitos Sexuales (Brisexme) y la Brigada de Investigaciones Policiales Especiales (BIPE) de la PDI, ocurrió la tarde del pasado lunes 3 de junio, en la intersección de calles Chacabuco con Catedral, en pleno Barrio Yungay.
Según relató la hermana de la víctima, todo sucedió luego que la escolar saliera del liceo tras haber rendido un examen, ocasión en que es abordada por cuatro desconocidos, que con pasamontañas y armas de fuego la obligan a subirse a un auto con vidrios polarizados.
“La agarraron del brazo y la tiraron hacia adentro. Ella forcejeaba y dijo que no se iba a subir. Y estos tipos bajaron con armas y la subieron a la fuerza. La ataron, la vendaron, iban todos con pasamontañas. Tenían un acento entre venezolano y colombiano”, consignó Radio Bío Bío.
“Pensó que la iban a matar”
Luego de llevársela por la fuerza, la hermana de la víctima señaló que “ella iba en el vehículo hasta que llegaron a un lugar, una casa, dice ella. La bajaron a la fuerza nuevamente, estos cuatro tipos, todos con pasamontañas. Y en esta casa la violan los cuatro. Dijo que le pegaron”.
Tras ser ultrajada, “mi hermana pensó que la iban a matar. Luego de terminar, de estar ahí, yo digo alrededor de una hora, una hora y media, la volvieron a agarrar a la fuerza, ella forcejeando, la subieron a este auto nuevamente. Se volvieron a poner la capucha, la tenían vendada, atada”, añadió la mujer.
Según la información que consta en la denuncia, la joven fue abandonada en un sitio eriazo de la comuna de Cerrillos, donde según relató su hermana, “con el auto andando la arrojan afuera, así, a un peladero. Dijo ella que ahí se levantó, corrió lo más rápido que pudo, porque pensó que iban a volver”.
Activación del protocolo
Una vez que la víctima es abandonada, logra llegar a un paradero de micros, donde es ayudad por unas señoras, a quienes les comenta lo que había ocurrido.
“La ven así rara, con su ropita rasgada, llorando, y le preguntan qué le pasó. Ella se pone a llorar y les cuenta. Entonces ellas le ofrecieron apoyo, la llevaron al departamento de una de ellas, en Las Rejas”, afirmó la hermana.
Posteriormente, en ese lugar, “dan el aviso a mis padres, que estaban trabajando, y ahí también fue cuando mi hermana me llamó y me pidió ayuda, y me mandó la ubicación donde estaba. Ahí llegaron a buscarla mis papás, y la trasladaron de inmediato al Hospital Félix Bulnes”, donde “se activó el protocolo. Llegó Carabineros a tomar declaración, después la PDI, la trasladaron al Servicio Médico Legal, le hicieron el peritaje y las pruebas correspondientes, y luego volvió al Félix Bulnes, donde quedó hospitalizada”, concluyó la joven.