Hay personas a las que les gusta ser vocal de mesa, independiente del pago que se recibe por cumplir esa tarea cívica, que es de dos tercios de UF, poco más de $24.000, que en el caso de los nuevos sube $8.000.
La norma legal indica que de la lista de votantes de cada mesa son sorteados por las Juntas Electorales los vocales, quienes son designados por un periodo de cuatro años.
Hay vocales que han reclamado pues consideran que han desempeñado muchas veces esa labor. Pero no hay que olvidar que desde 2020 ha habido ocho votaciones, que llegarán a nueve con el Plebiscito por la nueva propuesta constitucional del próximo domingo.
La lista de esas ocho elecciones es esta: Constitución política y tipo de órgano (25 de octubre de 2020), Gobernadores regionales, convencionales constituyentes, alcaldes y concejales (15 y 16 de mayo de 2021), Segunda votación de Gobernadores Regionales (13 de junio de 2021), Primarias presidenciales (18 de julio de 2021), Primera vuelta presidencial (21 de noviembre de 2021), Segunda vuelta presidencial (19 de diciembre de 2021), Plebiscito constitucional (4 de septiembre de 2022) y Elección del Consejo Constitucional (7 de mayo de 2023).
María Cristina Escudero, académica del Departamento de Estudios Políticos de la Facultad de Gobierno de la Universidad de Chile y consejera del Servicio Electoral, aclara que “una vez que uno es sorteado, la designación sigue aunque haya cambio de dirección”.
La profesora explica que “del sorteo son excluidos quienes han sido vocales por más de cuatro años. Hemos tenido un ciclo electoral muy intenso en el último tiempo y por eso hay una cantidad importante de vocales que lo han sido muchas veces. Pero ellos han sido designados porque desde la elección en la que fueron sorteados no han pasado más de cuatro años”.
María Cristina Escudero enfatiza en que “es preferible contar con experiencia sobre cómo se hace todo el ciclo de la votación. Por ello fue fijado este lapso de cuatro años”.