El registro de dos niños llorando dentro de un auto, viendo cómo adelante de ellos, delincuentes intentaban hacer una encerrona, ha sido profusamente compartida en redes sociales, por el terror de los pequeños que le pedían a su papá que saliera de ahí porque temían ser heridos.
Con “Mucho Gusto”, habló la hermana mayor de los niños de 4 y 8 años, Karelyn Luttecke. “Empiezan a atocharse los autos, a haber bocinazos y, enseguida, se empiezan a escuchar balazos”. (...) Mi papá es el que, a mi juicio, logró mantener una calma envidiable. Yo también soy mamá y me encantaría tener esa tranquilidad si algún día -ojalá nunca- nos toca vivir algo así”.
La joven precisó que tanto su papá como su pareja ya le habían hablado a los niños que esto podía ocurrir. “Estaban preparados, así como uno se prepara para la operación Deyse en el colegio, para arrancar ante un terremoto o una emergencia”, dijo.
La idea es “explicarles lo que estamos viviendo, de que estén al día, que este tipo de cosas puede pasarles, y que hay que aplicar algún protocolo dentro de lo que uno pueda reaccionar”.
Karelyn además reveló que sus pequeños hermanos “tuvieron pesadillas” tras la estresante situación que les tocó vivir, pero de igual forma fueron durante esta jornada al colegio.
Contó que la familia le recalcó que “le habían ganado a los bandidos, y que ellos eran valientes porque habían mantenido la calma. Se agradece que ellos le den este tinte, porque hace que todos nos despreocupemos un poquito y podamos contenerlos mejor”.