La ONG “Reporteros Sin Fronteras”, institución de origen francesa y cuyo objetivo es defender la libertad de prensa alrededor del mundo, publicó una nueva edición de su ranking de clasificación mundial sobre esta materia.
Respecto a la medición realizada en 2021, Chile cayó 28 puestos en la calificación de la libertad de prensa, ubicándose en el lugar 82 de 180.
El análisis de la ONG sostiene que “aunque la libertad de prensa está garantizada en la Constitución y en el ordenamiento jurídico, no siempre se respeta en la práctica” y que “el periodismo de investigación pierde terreno y las agresiones a periodistas se multiplican”.
El informe de RSF apunta también a la concentración de la propiedad en los medios de comunicación. “Aunque los medios de comunicación ofrecen a simple vista una cierta diversidad, en realidad pertenecen mayoritariamente a los mismos grupos económicos. Los principales periódicos son El Mercurio y La Tercera; las cadenas de televisión más vistas son TVN, Mega, ChileVisión y T13, y las emisoras de radio con mayor audiencia, Bío Bío, Cooperativa y ADN”.
“La población demanda cada vez más un mayor pluralismo informativo, lo que impulsa el desarrollo de medios alternativos, que aún carecen de profesionalidad y de fuentes de financiación estables”, añade el organismo.
Asimismo, el reporte añade que “los grandes medios van de la mano de grupos económicos cuyos intereses merman la confianza de la ciudadanía, por cómo abordan los temas susceptibles de generar conflictos de intereses. Los cambios emprendidos por la sociedad civil han puesto de manifiesto la necesidad de un órgano regulador que apoye la profesionalización de los medios y dote de mayor independencia a las publicaciones alternativas”
Finalmente, RSF plantea el proceso de cambio social que se vive en el país tras las protestas del 18 de octubre de 2019, señalando que “los ciudadanos y los movimientos sociales han dejado claro su recelo hacia las informaciones publicadas por los grandes medios de comunicación. Aunque existe una prensa y unos periodistas dignos de la confianza popular, hay una demanda social evidente a favor de una pluralidad y una diversidad mediáticas reales, que se plasmen en el proceso constituyente”.