La Navidad es un momento especial para todos, es la unión, el abrazo, los regalos, los niños, la cena en familia y la prosperidad.
También es el momento de potenciar las energías a través de rituales y baños para dejar atrás lo malo y estar limpios espiritualmente para recibir las buenas vibras.
La filosofía milenaria china, Feng Shui, tiene un abanico de posibilidades para lograr que la energía se equilibre y lo positivo llegue a tu vida.
Son muchísimas las personas eligen el Feng Shui y sus diferentes rituales para atraer mejoras sustanciales en los diferentes aspectos de su vida. En este sentido, la ceremonia del laurel y el agua es una de las más realizadas desde hace muchísimo tiempo.
La historia del laurel
El laurel, aseguraban los griegos, simbolizaba la victoria y la sabiduría. Era símbolo efectivo contra el mal. En las victorias de sus tropas, a los altos jefes militares, deportistas ganadores y hasta a los emperadores se les condecoraban y eran honrados con coronas de laurel que aún se conocen y son muy populares como símbolo de reconocimiento en la obtención de logros.
El uso del laurel fue generando mayores adeptos y con el pasar de los siglos, chamanes, espiritistas y monjes de la magia blanca empezaron a usar el laurel en sus rituales efectivos para atraer el dinero, la prosperidad, la victoria y la buena suerte.
A continuación te explicamos el sencillo, pero poderoso ritual del laurel y el agua para que lo hagas y recibas la navidad en prosperidad y abundancia.
Ritual de laurel y agua
- Tomar unas pocas hojas de laurel.
- Colocar las hojas de laurel en un recipiente con agua y dejarlas un minuto.
- Luego hay que sujetarlas con la mano, estrujar las hojitas hasta que se rompan y -finalmente- dejarlas en el piso.
- Estos simples pasos debes repetirlos 3 veces para lograr que las energías se renueven y preparen el camino para la llegada de salud, dinero y amor.