En el último capítulo del programa Podemos Hablar de Chilevisión, la exfigura de la farándula chilena, Titi Ahubert, rompió el silencio y reveló detalles inéditos sobre el polémico episodio conocido como el “mechoneo” de Daniella Campos, un incidente que la catapultó al ojo público a fines de los años 90. El episodio tuvo lugar en julio de 1999, en una discoteca de Santiago, y según Ahubert, todo comenzó por una escena de celos que involucraba al famoso futbolista Iván Zamorano.
Durante el programa, el animador Julio César Rodríguez recordó el evento que marcó un hito en la farándula chilena: “Ese día saltaste a la fama, por este supuesto mechoneo de Daniella Campos”, comentó Cretton. Ante esto, Ahubert no solo confirmó lo ocurrido, sino que también compartió nuevos detalles sobre cómo vivió ese incidente que la llevó a la palestra mediática.
“Pasó. Pasó que me tiró el pelo”, relató Titi, haciendo alusión directa a Daniella Campos. Entre risas, añadió: “Mira la poca cantidad de pelo que tengo. Perdí el doble”. Aunque con el paso de los años el recuerdo ha tomado un tono más relajado, la exmodelo no escondió el malestar que sintió en ese momento. “Sí, fue así. Sí, lo hizo, pero la disculpo”, expresó, demostrando que el tiempo ha sanado viejas heridas.
El programa mostró luego un video de Daniella Campos donde ella ofrecía su versión de los hechos, negando que el “mechoneo” haya sido tan dramático como se retrató en su momento. “El famoso mechoneo nunca existió. Hubo un acercamiento y creo que se pensó que podría pasar algo, pero no pasó. Bueno, pasó igual porque igual me tiraron el pelo. Fue la amiga de Titi Ahubert, pero nunca lo conté siquiera”, explicó Campos, restando importancia al incidente.
Ahubert, sin embargo, se mantuvo firme en su relato. “Dice que no, entonces yo digo: ‘Fue un fantasma’. Fue lo mismo que respondí”, comentó con ironía. Pese a la aparente ligereza con la que aborda el tema hoy en día, Titi también reveló lo doloroso que fue para ella en ese momento. “Julio, llegué a mi casa llorando ese día, a los pies de la cama de mi mamá. Fue horrible. Muy desagradable, Julito”, confesó.
A pesar de todo, Ahubert cerró el tema con una actitud conciliadora: “Pero Daniella, estamos perdonadas. Si ya da lo mismo. Cuántos años han pasado”.