Este miércoles, el cantante urbano Julianno Sosa fue víctima de una encerrona en la comuna de Peñaflor, donde un grupo de tres desconocidos le dispararon al momento de llegar a grabar un videoclip.
El hecho quedó registrado en una serie de videos viralizados en redes sociales, donde se pudo apreciar que en su arribo a un fundo en el sector de Peñaflor fue abordado por los delincuentes, quienes sacaron sus armas de fuego para intentar abatirlo a quemarropa.
La versión de Pablo Chill-e
Tras el violento ataque Sosa escapó del lugar para ser atendido en un centro hospitalario, donde se constató que recibió dos disparos de bala.
Y este jueves fue otro artista del género, Pablo Chill-e, quien dio cuenta con una serie de mensajes publicados en redes sociales del estado de Sosa.
Lo hizo con evidente molestia, y dejando en claro a quienes quisieron ultimar al artista, que el cantante estaba en las mejores condiciones físicas.
“El Juli está bien chu***. No mareen más la plaza, porfa”, escribió Chill-e en su cuenta oficial de la red social X, publicación que posteriormente replicó en una historia de Instagram.
Precisamente en esta última plataforma digital fue donde el cantante dio cuenta del buen estado de Sosa con una fotografía en la que ambos aparecen sonrientes y haciendo un gesto ofensivo con uno de los dedos de sus manos.
“Ni balas nos van a parar giles chu***. Somos hijos de Dios”, insistió Pablo, quien decidió desactivar los comentarios de su publicación en la red social.
Cabe recordar que en los últimos meses Julianno Sosa ha sido protagonista de variadas polémicas. La más reciente, en agosto del año pasado, cuando fue detenido en una fiscalización en Puente Alto -donde atropelló a un carabinero-; y en julio del mismo, cuando fue deportado desde Estados Unidos tras una residencia de siete años en la nación norteamericana.
Esto, luego de llegar a un acuerdo extrajudicial por ser detenido debido a la serie de delitos reiterados cometidos en Estados Unidos.
