Una tensa discusión se vivió en la casa de “Gran Hermano” cuando llegaron las animadores a hablar con los participantes. Jennifer Galvarini (Pincoya) manifestó su molestia con sus compañeros y los animadores del reality. Gritos, retiros de la habitación, interrupciones, versiones encontradas fueron la tónica de la velada.
Una vez que los animadores comentaron la situación con los panelistas, Francisca García-Huidobro no dudó en dar su opinión. En primera instancia, ella dijo que iba a necesitar medicamentos con estrella verde si es que hay una segunda versión del programa.
Sin embargo, el humor duró poco, y Fran comenzó a hablar en serio, “lo de la Pincoya me dejó agotada. Yo de verdad, a ustedes dos (los animadores) me saco el sombrero, yo la habría mandado a ese lugar donde salen los seres humanos, cuando no son cesárea”, señaló.
“Debo confesar que...”
“De verdad era un chiste, el griterío y la incapacidad de comunicar, el insultar. Yo creo que a ella lo de la pierna es lo que menos le dolió, lo que más le dolió fue lo de la radio. Ella hace una especie de acusación de discriminación que me parece tremendamente injusta, si es algo que hemos valorado de Jennifer, es su origen, es de donde viene”, continuó García-Huidobro.
“Las imágenes son clarísimas, ella se auto eliminó de la actividad, nunca nadie le dijo que no podía participar. A mí debo confesar que de las peleas de ‘Gran Hermano’, esta debe ser la que me dejó emocionalmente, psicológicamente y físicamente más cansada”, aseguró la panelista.
Por su parte, Michael Roldán se cuadró con su compañera, “lo que vimos hoy día es una tremenda falta de respeto de parte de Pincoya hacia el programa, para ustedes como conductores, para el público (...) el en vivo este espacio es sagrado, de alguna forma, es el minuto que ellos tienen que trabajar para el espacio, tienen que comportarse de una manera correcta”, agregó el periodista.