Luego de la victoria sobre Perú, su primera oficial al mando de la “Roja”, Eduardo Berizzo ganó crédito dentro de un proceso que ha sido tortuoso tanto en resultados como en actuaciones. Sin embargo, más allá de las mejoras exhibidas ante los “incaicos” y Colombia previamente, el DT está lejos de llenar el paladar de expertos e hinchas.
Por ello, el partido de esta tarde contra Venezuela asoma como bisagra para la etapa del “Toto”. Un triunfo puede encumbrar a la Selección a la parte alta de la tabla de posiciones, pero un empate o una derrota pueden sumirla nuevamente en un contexto de críticas y cuestionar la continuidad del entrenador.
Así lo ha dictado la historia, ésa que cuenta que el combinado nacional ha sido una visita non grata en suelo “llanero”. De hecho, de los ocho encuentros que han disputado en ese país en el marco de las Clasificatorias, el “Equipo de Todos” ha ganado seis, en diferentes ciudades: uno en Caracas, dos en San Cristóbal, otros dos en Puerto La Cruz y el restante en Barinas.
No obstante, esta última urbe reflota el primer recuerdo amargo del cuadro criollo visitando a la “Vinotinto”. Fue en 1996, en el arranque de las Eliminatorias rumbo a Francia 1998, donde una agónica igualdad 1-1 rescatada por Javier Margas no alcanzó para salvar el cargo de Xavier Azkargorta, inmediatamente reemplazado por Nelson Acosta.
La otra memoria dolorosa es reciente, en el 2020, en el último camino mundialista, hacia Qatar 2022. En la capital venezolana, los locales obtuvieron su hasta ahora único éxito en casa frente al conjunto chileno, un 2-1 que también cortó de cuajo la era de Reinaldo Rueda en el banquillo, dando paso a Martín Lasarte.
Ambos seleccionados no se han visto nunca las caras en Maturín, sede del duelo de hoy, ni en presentaciones por los puntos ni en amistosos. En el estadio Monumental, los “caribeños” supieron hacerse fuertes en el comienzo de la ruta al Mundial del 2026, propinándole un 1-0 a Paraguay en los descuentos, con gol de Salomón Rondón a los 93 minutos.
Aparte del artillero histórico, hay un par de “viejos conocidos” que aspiran a ser protagonistas de este compromiso. Uno de ellos es Eduard Bello, quien viene de anotar de chilena el tanto del inesperado 1-1 en Brasil, mientras que el otro es Yeferson Soteldo, quien entró desde la banca en Cuiabá, se mandó un lujito al estilo local y hace poco se peleó por lo mismo con Gary Medel en el Brasileirao.
