En la antigüedad, los equipos chilenos destacaban por generar buenos jugadores, pero a su vez, por tener un mal manejo de sus finanzas, en donde muchos clubes estuvieron en la mira de la insolvencia. Para esto llegaron las Sociedades Anónimas, pero aquello no ha rendido frutos en lo económico.
El Mercurio publicó un informe en donde se entrega el detalle de lo generado y perdido en el fútbol chileno, esto durante un periodo de los últimos seis años. La conclusión fue sorprendente: los clubes nacionales acumulan $72.357 millones (alrededor de US $81 millones) en pérdidas y tan solo 10 equipos, de los 34 que han pasado por el profesionalismo, cerraron el periodo con cifras positivas.
En el desglose, las directivas de Universidad de Chile y Colo Colo son las peores en este aspecto, los azules generaron $19 mil millones en pérdidas, a su vez, los albos arriesgan no poder hacer fichajes de cara a la temporada 2023.
Muy por el contrario, los clubes que sacaron saldo positivo eran los que justamente no han estado en la lucha por el campeonato, como el caso de Deportes Antofagasta, conjunto que en los últimos años disputa la mitad de tabla y/o la permanencia, y que generó $5.424 millones, liderando el ranking, lo siguen de cerca Huachipato y Universidad de Concepción, equipo de la Primera B.
Bajo este contexto de pérdidas, ¿existe la posibilidad de la desafiliación? Si bien aún falta consignar las cifras de la temporada pasada, hay situaciones en algunos equipos que es más preocupante que en el resto, es el caso de Deportes La Serena quien de no mejorar entraría en el rada de la Unidad de Control Financiero (UCF), en aquella senda los acompaña Barnechea y Santiago Wanderers, este último es de los que más dinero ha perdido quitando a los 3 grandes del balompié nacional.