Policías de la Unidad Canina de Vila-real, en Castellón, están trabajando en un curioso, pero necesario entrenamiento, están usando a sus perros para detectar cáncer de próstata con el olfato, mediante muestras de orina.
Llevan dos años de investigación, asesorada por el Instituto de Investigación Sanitaria La Fe de Valencia y cuenta con el apoyo de la Asociación Española Contra el Cáncer. El objetivo es agilizar el diagnóstico de cáncer de próstata aprovechando las capacidades olfativas de los perros, ya que sus fosas nasales albergan entre 200 y 300 millones de células olfativas, contra las cinco millones que tenemos nosotros, los humanos.
La idea surgió como respuesta al hallazgo de que los perros diferenciaban muestras de orina de pacientes con cáncer. La idea es que los perros sean capaces de identificar y señalizar muestras de orina de pacientes que presentan compuestos procedentes del metabolismo de células cancerígenas.
Los perros usados en este estudio son expertos en detectar sustancias, dinero e incluso armas, por lo que se han convertido en un investigador más en el equipo.
El estudio ha combinado tanto las pruebas de laboratorio como la técnica de presentarles a los animales un total de más de 1.000 muestras. Los perros han sido precisos, hasta el punto de detectar algunos falsos positivos y negativos, que ahora están en seguimiento para ver cómo evolucionan.
Según datos de Sanidad Española, cada año se diagnostican en ese país más de 28.000 casos nuevos de cáncer de próstata. Se trata del segundo tipo de cáncer más común y la sexta causa de muerte por cáncer entre los hombres. Se calcula que, estadísticamente, uno de cada seis varones desarrollará en España un cáncer de próstata a lo largo de su vida.
¿Y tú, le confiarías tu diagnóstico al mejor amigo del hombre?