Esperanzado está el ministro de Hacienda, Felipe Larraín, tras el anuncio este domingo de EEUU y China sobre acordar uana tregua de 90 días a su guerra comercial.
Tras participar del comité político en La Moneda, el jefe de la billetera fiscal, sostuvo que «hay destacar que se hayan sentado a la mesa a conversar y que esta es la vía para generar acuerdos y progresos», para así detener esta escalada «que al final nos perjudica a todos».
Si bien, reconoció que el cese de las hostilidades entre las dos potencias no es garantía del fin de éstas, «si esto desemboca en una liberalización del comercio entre estas dos economías, para nuestra economía, sin duda, que nos resulta más posible crecer más en un escenario de mayor comercio y mayor crecimiento mundial«.
Larraín explicó que esta situación genera efectos en el mercado del cobre, que es nuestro principal producto de exportación, y también sobre los mercados financieros. «Lo que tenemos que hacer es que esto no se evapore, que se materialice», subrayó.