El presidente electo Jair Bolsonaro reiteró el jueves los planes para trasladar la embajada de Brasil en Israel de Tel Aviv a Jerusalén, como ya hicieron antes Estados Unidos y Guatemala. El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dio rápidamente la bienvenida al plan.
En un tuit publicado el jueves, Bolsonaro dijo: “Como afirmé previamente durante nuestra campaña, tenemos la intención de trasladar la embajada brasileña de Tel Aviv a Jerusalén. Israel es un estado soberano y todos deberíamos respetarlo”.
Como afirmado durante a campanha, pretendemos transferir a Embaixada do Brasil de Tel Aviv para Jerusalém. Israel é um Estado soberano e nós o respeitamos.
— Jair M. Bolsonaro (@jairbolsonaro) November 1, 2018
Esta fue la primera vez desde su elección el pasado domingo que Bolsonaro se refirió a su plan para trasladar la sede diplomática.
En Israel, Netanyahu emitió un comunicado elogiando a Bolsonaro. «Felicito a mi amigo el presidente electo de Brasil, Jair Bolsonaro, por su intención de trasladar la embajada brasileña a Jerusalén ¡Un paso histórico, correcto y emocionante!”, dijo la nota.
מברך את ידידי נשיא ברזיל הנכנס, ז'איר בולסונארו, על כוונתו להעביר את שגרירות ברזיל לירושלים. זהו צעד היסטורי, נכון ומרגש!
— Benjamin Netanyahu (@netanyahu) November 1, 2018
Netanyahu habló con Bolsonaro antes esta semana para felicitarlo por su victoria electoral e invitarlo a visitar el país.
Si Bolsonaro cumple su promesa, Brasil se convertiría en el tercer país en mover su legación diplomática a Jerusalén, tras Estados Unidos y Guatemala. Paraguay también hizo el traslado, pero poco tiempo después regresó a Tel Aviv tras la elección de su nuevo presidente, Mario Abdo Benítez.
Jerusalén
Los palestinos reclaman Jerusalén, que fue capturado por Israel en la guerra de 1967, como la capital de un futuro estado, mientras que Israel considera toda la ciudad, incluyendo el sector oriental donde están los sitios religiosos más importantes, como si capital eterna.
La mayoría de los países mantienen embajadas en Tel Aviv alegando que el estatus final de Jerusalén debe decidirse en negociaciones.